Toluca, Méx.— En el Estado de México, 30% de las mil 362 Escuelas de Tiempo Completo operan con aportaciones económicas de los padres de familia; el resto se mantiene a la espera de las nuevas disposiciones por parte de la Secretaría de Educación Pública (SEP), informó el secretario de Educación mexiquense, Gerardo Monroy.
En entrevista con EL UNIVERSAL, refirió que a estas escuelas asistían 280 mil alumnos y para su operación tenían un presupuesto de 820 millones de pesos, que es lo necesario para que se mantuvieran abiertas. De ese monto, solamente para servicio de alimentación se utilizaban 305 millones de pesos.
Sin embargo, a raíz de la cancelación del Programa de Escuelas de Tiempo Completo, desde diciembre del año pasado, algunos papás decidieron aportar recursos de su bolsa, sobre todo para mantener abiertos los comedores de un poco más de 400 planteles, necesarios para los horarios extendidos.
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Monroy puntualizó que los docentes de las instituciones que se mantienen operando trabajan horas extras, pues se encuentran comprometidos con los niños.
Agregó que la secretaría estará al tanto para respetar los nuevos lineamientos, toda vez que este esquema es importante para las madres que trabajan, que necesitan un espacio seguro para sus hijos, adicionalmente de un ingreso extraordinario para los maestros a cargo de esas horas, pero que ahora algunos papás están tratando de mantener a flote con recursos propios.
“Es un programa muy noble, que beneficia a las familias mexiquenses, sobre todo a mamás trabajadoras, alumnos que quieren prepararse aún más, que buscan regularizarse y tener jornadas adicionales para reforzar su aprendizaje”, apuntó.
Gerardo Monroy recordó que en algunos casos los padres de familia se hacían cargo de preparar los alimentos en estas escuelas, adquirir los productos de la despensa, y algunas mamás se asignaban los roles para atender el comedor.
El secretario mencionó que la SEP propuso que se mantengan estas alternativas bajo otra directriz, del que debe haber lineamientos publicados en el Diario Oficial de la Federación (DOF) bajo el programa La Escuela es Nuestra, mediante el que se propone entregar los recursos directamente a los padres de familia.