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Tlalnepantla, Méx.— “Miedo y nervios” generó escuchar la alerta sísmica replicada por empresas en la zona del cerro del Chiquihuite, donde “antes no se sentían los temblores, pero el del 7 de septiembre fue intenso”, aseguraron vecinos del lugar donde tres días después se derrumbaron pesadas rocas, dejando atrapadas a tres personas, una joven fallecida y otra más lesionada.
Aquí no hay altavoces del C5 o cámaras de videovigilancia para reportar una emergencia o que repliquen la alerta sísmica; sin embargo, algunas empresas de la zona emitieron el emblemático sonido en lo alto de la colonia Lázaro Cárdenas Segunda Sección.
El sismo del 7 de septiembre y las intensas lluvias provocaron, tres días después, la caída de piedras de más de 200 toneladas sobre al menos cuatro viviendas, en una de ellas quedó atrapada Paola y sus dos pequeños hijos; el fallecimiento de Marina, una joven estudiante de la UNAM, y lesiones a Jessica, quien fue rescatada con vida.
En punto de las 11:30 horas del domingo 19 de septiembre, bomberos y personal de Protección Civil del Estado de México y de Tlalnepantla hicieron sonar bocinas para alertar a la gente para salir de sus casas.
La mayoría de los vecinos optó por permanecer dentro de sus hogares, pues pese a que más de 50% ya desalojó las viviendas que se ubican en un radio de 200 metros de alto riesgo de derrumbe, muchos optaron por permanecer en los inmuebles para evitar robos o la pérdida de su patrimonio.
Los pocos que salieron lo hicieron temerosos junto a elementos de la policía estatal, Guardia Nacional y bomberos de Tlalnepantla.
“Dan nervios de que otras rocas del cerro se puedan desprender y caer sobre más casas”, expresaron vecinas en la calle Alpina Chamonix.
“Oír la alerta sísmica me pone la piel chinita y se me olvida que sólo es un simulacro”, afirmó María al inicio del ascenso por casi 200 escalones que llevan a la llamada “zona cero”, donde aún se mantienen las labores de búsqueda de Paola, de 22 años, y del pequeño Jorge Dilan, de cinco.
Hasta este domingo suman 153 familias registradas en las mesas de atención a damnificados, quienes habitan en 49 predios aledaños al derrumbe de pesadas rocas que durante la madrugada registraron deslizamientos, informaron autoridades.