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"Si yo hubiera llegado cinco minutos antes estaría muerto", dijo Fernando García, checador de la base ubicada en la Calzada Ignacio Zaragoza y Río Churubusco, donde el miércoles pasado un hombre en estado de ebriedad atropelló a nueve personas, de las cuales cuatro fallecieron.
Ese día el camión que toma el checador para llegar a la base tardó cinco minutos más de lo habitual en completar el pasaje para iniciar el viaje, por lo que Fernando García tardó cinco minutos más de lo habitual en llegar al punto, "por eso yo creo que llegamos un poco retrasados, sino también me toca a mí".
Desde hace cuatro años García está acostumbrado a llegar entre las 4:20 y 4:25 horas a la base, pero ese día "las cosas se alinearon yo creo, si no estaría muerto o convaleciente en el hospital, sólo hay de dos".
¿Qué pasó Río Churubusco y Calzada Ignacio Zaragoza?
El 4 de diciembre un automovilista, de 25 años de edad, que conducía en estado de ebriedad, atropelló a nueve personas, de las cuales cuatro fallecieron y cinco resultaron gravemente lesionadas, en la esquina de Río Churubusco y Calzada Ignacio Zaragoza, en la colonia Aviación Civil, alcaldía Venustiano Carranza.
"No sé si llamarlo milagro pero toda la gente que me conoce llega y me saluda porque pensó que había sido de los que se llevó el carrito", señaló el checador, mientras miraba unas cruces de madera que personas en situación de calle colocaron en el lugar del incidente.
García aseguró que no olvidará el momento en que su hijo, que trabaja en una gasolinera cerca del lugar de los hechos, lo abrazó. "Me dijo que no lo dejaron bajar antes del camión porque ya no estaba parada, pero él ya había visto todo, y cuando ya pudo corrió a buscarme porque sabe que trabajo aquí, pensó que me había pasado algo, y dice que nada más escuchó mi voz y corrió a abrazarme".
Tras casi una semana del incidente, el trabajador continúa traumado, y asegura que "es algo que nunca voy a olvidar, porque me enseñaron el periódico y se ve feo, pero lo que se ve en persona nada le gana. No se me puede olvidar nada, las personas, los gritos".
Así vivieron los testigos el accidente
De acuerdo con Erick, quien vive en un asentamiento irregular a unos pasos de donde ocurrió el incidente, alrededor de las 4:20 horas escuchó un golpe, y cuando salió de su casa de campaña vio el carro atravesado en la calle, "con el motor casi hasta el piso".
"Mi hermano y yo vimos bajar al chavo del carro, estaba como inerte, en shock, como si no supiera nada de lo que acababa de pasar. Como tieso", dijo Erick, quien aseguró que el conductor venía "muy tomado y quién sabe qué otras cosas traía".
Señaló que el automovilista, que venía acompañado de un hombre, estaba muy insistente en que "no hice nada, no hice nada. Además soy de aquí, vivo bien cerca, déjenme ir".
Luego, dijo Erick, "bajó una chava que venía con ellos en otro carro y le decía, pues cómo no hiciste nada, güey, ve todo. Ya entre nosotros y unos de los puestos lo agarramos para que no se fuera, pero la mujer que te digo se puso en medio de nosotros, abrazándolo".
Cuando Fernando García, checador de la base, llegó, "ya vi personas llorando; los que estaban vivos gritando, y había una señora que yo creo era su familiar, con un muerto en sus piernas. Eso no se me olvidar".
vcr
