Oliva López Arellano, secretaria de Salud de la Ciudad de México, afirmó que durante la transición ha trabajado junto con la próxima titular de dicha dependencia, Nadine Gasman, con una perspectiva de incidencia en el territorio y bienestar de la población.
“Hemos trabajado intensamente, tenemos una enorme coincidencia en términos de la perspectiva del trabajo territorial, de la prioridad de la salud, de entender la atención médica, que es muy importante, todo lo que tiene que ver con la incidencia en los territorios, en el bienestar de las personas. En esta perspectiva es que hemos estado trabajando”, indicó.
En entrevista tras la presentación del número especial de la revista Salud Pública de México “La transformación del sistema público de salud en México”, la secretaria afirmó que también se ha estado trabajando junto a su sucesora con los distintos equipos, tanto en el ámbito de la atención médica -que ya está prácticamente del lado del IMSS-Bienestar- como en materia de la rectoría, gobernanza y las jurisdicciones sanitarias, que eventualmente se convertirán en distritos sanitarios.
Cuestionada acerca de si en esta época de transición habrá garantía de los puestos de vacunación en la CDMX, López Arellano aseguró que se tarta de un sistema de salud público que trabaja de forma coordinada, por lo que “de los servicios que tenemos, para arriba, no se pierde nada”.
Por su parte, Nadine Gasman, quien será la próxima secretaria de Salud explicó que se encuentra conociendo la dependencia y destacó que tiene claridad en que el objetivo para la próxima administración será fortalecer los servicios de salud y ampliar la capacidad de llegar a las casas y escuelas capitalinas.
“El objetivo es continuar el trabajo que se ha hecho en este primer piso de la transformación, fortalecer los servicios, por un lado, y sobre todo ampliar la capacidad de llegar a las casas, a las colonias, a las escuelas, con una visión de promoción de la salud, de prevención y de producción de la salud”, señaló.
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