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Los ajustes de cuentas entre células que se dedican a la venta de drogas al menudeo en la Ciudad de México han colocado a la metrópoli como una de las más inseguras en el país.
Sólo durante el fin de semana —de viernes a domingo— la procuraduría capitalina abrió un total de 21 carpetas de investigación por homicidio doloso; en todos estos casos hubo dos factores comunes: el uso de armas calibre nueve milímetros y que las víctimas tenían antecedentes penales.
Además, en la escena del crimen se encontraron dosis de diversas drogas, lo que apuntala la investigación de las autoridades capitalinas. Según los expedientes, tan sólo en la alcaldía de Gustavo A. Madero fueron 15 las víctimas relacionadas con la venta de drogas, mientras que en la alcaldía de Cuauhtémoc, en específico en el sector de Tepito, fueron asesinadas otras seis personas.
A esto se suma el doble homicidio de una pareja en la alcaldía de Azcapotzalco, donde a decir de testigos, los ahora occisos supuestamente se dedicaban a distribuir bajo pedidos cocaína, marihuana y cristal. De todos estos eventos, hasta el momento no se ha dado a conocer la detención de los responsables, sin embargo, se cuenta con una línea de investigación para la resolución de los casos.
Este fin de semana la alcaldía de Gustavo A. Madero fue la más violenta, superando los eventos que se registraron en Cuauhtémoc, lugar que, a decir de las autoridades, es el centro neurálgico de la violencia derivada de los grupos de narcomenudistas que integran el Cártel de Tepito contra los autodenominados Anti-Unión.
Las cifras de homicidios dolosos en la Ciudad van en incremento durante este año 2018, donde el promedio diario de víctimas superó las tres personas, mientras que el año pasado los números se mantenían en apenas dos.
Las cifras revelan que el promedio de víctimas mortales por arma de fuego incrementaron de dos a tres en alcaldías del sur como lo son Coyoacán, Xochimilco, Tláhuac y Tlalpan, donde la constante es la misma que en la zona centro y norte: la disputa por el territorio para la venta de drogas al narcomenudeo.
Los enfrentamientos entre grupos delincuenciales antagonistas ha generado que capitalinos y visitantes se sientan vulnerables e inseguros, lo que afecta la economía de zonas como la Plaza de Garibaldi, en donde a raíz de un ataque contra cinco personas en un local de esa zona el mes pasado, la clientela y el turismo ha disminuido, provocando la pérdida de empleos, según refieren comerciantes y músicos del lugar.
