Un día después de su inauguración, luego de seis años de que inició el proyecto, el Centro de Transferencia Modal (CETRAM) San Lázaro, en la Venustiano Carranza, lució casi vacío, con apenas unos cuántos camiones y combis y con pocos usuarios.
Durante un recorrido por las instalaciones, EL UNIVERSAL constató que, en las primeras horas de este martes, pocas personas hicieron uso de las rutas. Cerca de las 9:00 de la mañana, en el andén B apenas se encontraban estacionados una combi con dirección al Estado de México y un camión, hacia Apizaco.
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“Se ve re’ vació, ¿no? Pero pues qué bueno que ya lo abrieron, yo creo que a mucha gente sí le beneficiará”, comentó una usuaria que descendió de la Línea B del Metro para abordar el Metrobús.
“¡Súbale! A Santa Barbara, Puente Rojo, Caseta Vieja ¡súbale!”, se escuchó gritar a un hombre a las afueras de una combi, con destino a distintos puntos del Estado de México.
Para las 9:30 de la mañana, habían hecho parada tres camiones, de los que apenas descendieron unos cuántos pasajeros.
Mientras que, en la zona de taxis, en poco más de 45 minutos, no se vio a ningún vehículo.
Rosa, una ciudadana de 32 años, que descendió de un camión en la terminal, coincidió en que “hay poca gente, supongo que no se ha dado mucha difusión de las nuevas rutas”.
En el otro extremo del CETRAM, los negocios lucieron abarrotados de usuarios que aprovechan para adquirir un café o algún alimento para desayunar, de camino a sus trabajos y escuelas.
Un comerciante, ubicado en los alrededores del CETRAM recién inaugurado confío en que con la apertura puedan tener más ventas.
“Ojalá sí, eso esperamos, también la verdad es que con la Línea 1 que se abrió apenas, hay más gente en toda esta zona porque sí bajó mucho”.