En Sábado de Gloria hasta a las autoridades capitalinas se les olvidó la crisis por el agua. Las fuentes del Centro Histórico se activaron para que los niños y adultos pudieran jugar, aventarse el líquido o cargar pistolitas de agua para atacar a quien se pusiera enfrente. En colonias como Morelos y Guerrero, incluso, se vio a personas mojarse a cubetazos.
El Monumento a la Revolución se volvió un parque acuático y la explanada un prado en donde las familias instalaron sombrillas enormes para cubrirse del sol.
Sacaron sándwiches, tortas, papas, refrescos, y rodeados por las carpas del Remate de Libros, hicieron de la Plaza de la República un parque acuático. Llevaban mudas de ropa, toallas, chanclas y trajes de baño improvisados a short y playera, sin importar el género.
Quienes fueron en búsqueda de un libro tuvieron que convivir con los chorros de agua que salían de las fuentes y que los niños desviaban con sus pies, provocando que el agua saliera disparada por doquier.
La escena de los niños y algunos adultos refrescándose con el agua de las fuentes también se repitió en la Alameda Central. Mientras que en algunas calles de las colonias Morelos y Guerrero, EL UNIVERSAL logró captar a niños y jóvenes bañándose a cubetazos, sacando agua de cisternas y directo de la llave.
La preocupación por la falta de agua parece que por momentos se olvidó en estas zonas.
Familias optan por balnearios
Para no perder la tradición de mojarse en este día, hubo quienes optaron por los parques acuáticos de la Ciudad, como el de La Ballenita, ubicado en la colonia San Simón, en la alcaldía Cuauhtémoc.
Familias completas aprovecharon para llevar comida y salir de la rutina estas vacaciones de Semana Santa. Nadie pensó en la crisis del agua, pues consideran que no están desperdiciándola, ya que ésta se queda en las albercas.
Además, trabajadores de la demarcación supervisaron que no se extrajera el agua para aventarla en las áreas comunes.
Edwin arribó desde la colonia Santa María La Ribera con 40 familiares, trajeron costillas, pico de gallo, tortillas y salsa para hacer un asado. Llegaron desde las 8:00 horas al lugar.
“Somos como 40 [familiares], nos queda cerca, somos de aquí de la colonia Santa María La Ribera. El ambiente es bueno, práctico. Hicimos un asado con longaniza, nopalitos, todo lo que ves ahí”, dijo Edwin.
Y es que para las familias La Ballenita es un espacio para salir de la rutina, y no tiene que ser en una fecha en especial.
Hasta el fondo del parque, Josué Rodrigo y su familia prepararon los festejos por el cumpleaños de su hijo menor. La temática fue Grogu o mejor conocido como Baby Yoda, de la saga de Star Wars, personaje que le gusta mucho a su hijo, comentó.
“Queríamos algo, si no diferente, sí fuera de lo común. No tiene que ser un día en especial para venir a disfrutar a la familia, yo creo que se puede tomar cualquier otro día de la semana, siempre y cuando se tenga la disponibilidad de tiempo y las ganas”, expresó.
Josué Rodrigo afirmó que ver a las familias conviviendo, es sacar el estrés del día a día, aprovechar de los días de asueto sin gastar mucho y refrescarse como tradicionalmente marca el Sábado de Gloria.