Toluca, Méx.— Empresarios restauranteros del Estado de México advirtieron que a partir de enero habría despidos de hasta 20% del personal, es decir, quedarían plantillas de trabajadores de la mitad de los contratados en 2019, debido al incremento del salario mínimo para el próximo año; los ajustes conllevan cambios en la operación del servicio, como acortar turnos de los empleados para ajustar los gastos fijos, refirieron.
Mauricio Massaud, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en el Estado de México, lamentó que la previsión es recortar turnos, por ejemplo, en desayunos, y dejar personal sólo para las comidas, ampliar los horarios laborales de la mitad de los empleados e incluso contener las ventas en algunos productos para poder sostener los negocios.
A la par, dijo, habrá cambios en las cartas, pues productos como los cortes de carne, así como proteínas como pollo o pescados “son insostenibles” a la compra y aumentar el precio a la venta no es opción porque el consumidor no lo pagaría. En este caso, señaló, hay alzas de hasta 28%, mientras que el acumulado de los incrementos en precios de los platillos en carta es de 8%.
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El presidente de la Canirac en el Estado de México señaló que si bien el gobierno federal anunció como una medida positiva el alza al salario mínimo, la realidad es que tras el embate económico de 2020 a 2022 no han logrado recuperarse. “En el mes de mayo también viene un tema de sindicatos que incide directamente en el sector, es decir, 2023 no se vis- lumbra como un buen año, pues lo interesante es ver cómo vamos a atacar la parte inflacionaria, el costo de los productos.
“Muy probable es que el año que entra debamos realizar ajustes en las plantillas derivado de la problemática inflacionaria, pues queda en 208 pesos el salario mínimo, pero las obligaciones impactan en los empresarios”, ahondó.
El líder empresarial aseveró que este sector se encuentra 30% por debajo de la meta en recuperación de empleo, es decir, del 100% de los trabajadores en 2019 sólo han recuperado 70%; no obstante, los costos de los insumos son elevados y por ello las ventas son precarias.
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Alejandro Rayón, presidente de Canirac en el Valle de Toluca, indicó que es probable que debido al alza en el precio de la renta, además del impacto del ambulantaje sobre negocios de ropa y comida, podrían cerrar 6% de los locales del centro de Toluca.
Detalló que la razón es porque las ventas han caído hasta 20% sólo en días recientes, pues los consumidores, al encontrar alimentos en la calle, dejan de consumir por lo menos uno o dos platillos en los restaurantes, además de que para este sector es complejo solicitar créditos bancarios para seguir solventando y soportar unos días más.
“Sí visualizamos otra caída de cortinas en febrero o marzo, se combinan varios factores, el aumento de renta, el precio de los productos; los daños son en restaurantes y comercio en general”, comentó.
Rayón enfatizó que la informalidad es un tema de competencia desleal, pero también de inseguridad, lo que deriva en que la gente deje de asistir al centro de la capital mexiquense.
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