metropoli@eluniversal.com.mx
Tecámac, Méx.—Tres unidades de la línea de transporte San Juan Zitlaltepec fueron incendiadas ayer, dos de ellas en el paradero de la Ruta 1 del Mexibús, en Ojo de Agua, Tecámac, y la otra en la colonia Vallejo Poniente, de la alcaldía Gustavo A. Madero, presuntamente por miembros de una organización criminal, sin que se registraran lesionados.
De marzo pasado a la fecha, tres operadores de esa ruta fueron asesinados y a 19 vehículos concesionados les prendieron fuego los supuestos integrantes de la banda que opera en el corredor Ecatepec-Tecámac-Zumpango, que por primera vez quemaron un automotor de esa empresa en la Ciudad de México.
La madrugada de ayer, un comando integrado por entre seis y ocho hombres se presentó en el paradero de la estación Ojo de Agua para incendiar dos unidades de la línea de transporte conocida de manera popular como Las Brujas.
Según las autoridades locales de Tecámac, el grupo armado se identificó con los conductores como del Cártel Jalisco Nueva Generación.
Éste es el segundo ataque que se registra en menos de una semana contra integrantes de esa ruta. La semana pasada dos de los conductores fueron asesinados, después de que les quemaron sus unidades en la comunidad de Ozumbilla.
Ayer, cerca de las siete de la mañana, dos sujetos a bordo de una camioneta blanca interceptaron al conductor de la vagoneta Mercedes Benz, tipo Splinter, con placas 66RA7K, que iba sin pasajeros.
Cuando circulaban sobre las calles de Meyember y Albéniz, en la colonia Vallejo Poniente, alcaldía Gustavo A. Madero, los presuntos delincuentes, sin dañar al chofer, lo bajaron de la unidad y quemaron el vehículo, luego huyeron hacia el Estado de México.
La indagatoria apunta a que esta célula pertenece a la organización criminal de Miguel Ángel “N”, conocido como El Monterrey, quien fue detenido en Sonora en noviembre pasado y se dedicaba a extorsionar a concesionarios del transporte público en el Valle de México, principalmente en la zona oriente.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGEM) tiene la hipótesis de que uno de sus hermanos es el que está al frente de esa agrupación delictiva.
La procuraduría capitalina tiene registradas tres denuncias por extorsiones al transporte público durante el primer semestre del año. Las investigaciones revelan que al menos cuatro líneas de peseros y vagonetas pagan derecho de piso.
Estos camiones operan en las inmediaciones de las alcaldías Gustavo A. Madero y Azcapotzalco, principalmente, y tienen sus bases en los alrededores de La Raza e Indios Verdes, así como en los alrededores del Reclusorio Norte.
Amenazan a los choferes con asaltar o herir a pasajeros si no se paga una cuota diaria de hasta 500 pesos por cada unidad que circule por lo que llaman “su territorio”.
Por falta de denuncias ante las autoridades ministeriales, la procuraduría capitalina no ha identificado al grupo extorsionador, pero se sospecha que sean delincuentes improvisados que utilizan el nombre del Cártel Jalisco Nueva Generación o de La Unión Tepito para intimidar a sus víctimas.
Los grupos delictivos están asentados en el límite de Gustavo A. Madero y Naucalpan, desde ahí operan y gradualmente se extendieron hacia la Ciudad de México, pues a los operadores que extorsionan circulan por la misma ruta.