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El grupo parlamentario de Morena propuso quitarle a las alcaldías el ejercicio del presupuesto participativo y entregarlo directamente a los ciudadanos.
Esta idea de iniciativa de la Ley de Democracia Participativa, que no ha sido presentada formalmente ante el pleno del Congreso, pretende sustituir a la Ley de Participación Ciudadana vigente, en la cual se establece que las asambleas ciudadanas sustituirán a los comités.
En cuestión del presupuesto participativo, la Secretaría de Administración y Finanzas será la que publique los lineamientos necesarios para el ejercicio de este recurso, compuesto del 3% del presupuesto anual de cada alcaldía.
Una vez que hayan aprobado los proyectos, el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) convocará a una asamblea ciudadana para nombrar a los comités de ejecución y vigilancia: el primero será el responsable de realizar las acciones para que el proyecto sea efectuado bajo los parámetros de eficiencia y los tiempos necesarios; el segundo deberá comprobar que sea ejecutado de acuerdo con los principios de transparencia, honestidad y diligencia.
“El recurso financiero tendrá que ser entregado a los comités de ejecución dentro del primer cuatrimestre del año fiscal del que se trate, y ejercido en el siguiente cuatrimestre”, se lee en el documento.
Ambos comités serán integrados por los ciudadanos que lo deseen y estarán coordinados por una persona que resulte sorteada en la asamblea ciudadana.
Los recursos del presupuesto participativo se deberán ejecutar para las mejoras de la comunidad, pero de ninguna forma podrá suplir o subsanar las obligaciones que las alcaldías deben realizar.
En los artículos transitorios de la propuesta de ley se indica que las comisiones de participación ciudadana y la Consulta de Presupuesto Participativo 2019 serán convocadas en la primera semana de junio; la jornada electiva y de opinión a más tardar la última semana de noviembre.
