Toluca, Méx.— En el Estado de México se prevé que la llegada de una cuarta ola de contagios de Covid-19 sea en enero, luego de las fiestas decembrinas, informó Jaime Contreras Sánchez, jefe del Departamento de la Infancia y de la Adolescencia del Instituto de Salud estatal (ISEM).
En entrevista, dijo que si bien es cierto que la entidad no está exenta de reflejar una cuarta ola de contagios, como ha ocurrido en otras entidades del norte del país como Baja California, Zacatecas y Chihuahua —donde comienza a haber un ligero repunte—, “las autoridades mexiquenses estaremos esperando que en caso de que se presente en el Estado de México una cuarta ola, será aproximadamente para enero o febrero”.
“Estaremos muy atentos a los resultados del Halloween, el Día de Muertos y el regreso a las clases presenciales, pero vienen fechas todavía más importantes [en diciembre]”, precisó.
Puntualizó que es necesario esperar las fiestas a partir del 12 de diciembre, cuando se celebra a la Virgen María y las reuniones familiares por la Navidad y el Año Nuevo.
Jaime Contreras, uno de los funcionarios encargados de atender la pandemia, agregó que hay 25 hospitales en la entidad destinados para atender a pacientes con el virus y “se tomó la decisión de mantenerlos todos como hospitales Covid porque no sabemos si se presente una cuarta ola”.
Dijo que todos estos espacios forman parte de una red de atención de enfermedades respiratorias agudas graves. No solamente atienden a pacientes con Covid-19, también la influenza o aquellas relacionadas con otro tipo de virus y bacterias.
A la baja
Jaime Contreras refirió que actualmente la tendencia de la tercera ola de la pandemia en la entidad refleja un descenso y durante las dos últimas semanas sólo 7% del total de pruebas rápidas y PCR dan resultados positivos, cuando durante la primera y segunda ola se promediaba 55%.
“Otro de los indicadores que medimos es el riesgo de contagio de una persona a otra, que habitualmente se encuentra en 1.5% y que actualmente está en 0.7%”, destacó.
Señaló que desde hace dos semanas la ocupación de los 25 hospitales que atienden a pacientes Covid-19 se encuentra entre 15% y 20%, de los cuales 85% son personas que no recibieron la vacuna.
Estos elementos, aunado a que 85% de la población joven de 18 años cuenta con al menos una dosis de vacuna contra Covid-19, y de los 30 en adelante tienen el esquema completo, “nos permite tener cierta tranquilidad”.
Recordó que la vacuna lo que permite es un menor riesgo de complicaciones, pero no exenta a las personas de contagiarse, con la posibilidad de evitar la pérdida de la vida.
Especificó que hay casos en los que a pesar de que el paciente tiene el esquema completo de vacunación, no controla la diabetes, hipertensión u otras comorbilidades y puede agravar, por lo que recomendó cuidar ese tipo de padecimientos.
Jaime Contreras enfatizó que el llamado a la población es no caer en la confianza, pues si bien la mayor parte de la población se encuentra vacunada, la postura de la Secretaría de Salud es continuar incentivando las medidas preventivas, “de ninguna manera podemos hacer a un lado el uso del cubrebocas”.
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