Más Información
Denuncian agresión de presuntos militares contra trabajadores en Tamaulipas; una de las víctimas falleció, tenía huellas de tortura
Diputados avalan súper secretaría de García Harfuch; SSPC investigará delitos y coordinará inteligencia a nivel nacional
Elección judicial: Aspirantes a cargos comparten carta de motivos y hasta currículum; “Justicia no debe ser inaccesible”, afirman
Yasmín Esquivel defiende la reforma judicial en Con los de Casa; alejado de la realidad pensar que es una venganza política, afirma
México hablará con Trump sobre el T-MEC en febrero; no es obligación del país tener órganos autónomos, afirma Ebrard
En plena hora pico, usuarios de la Línea 1 del Metro, de Pantitlán a Isabel la Católica, en su segundo día de operación, vivieron confusión, un transbordo complicado y, de plano, algunos, optaron por seguir utilizando el servicio emergente, ya sea las unidades de RTP, Metrobús o el Mexibús.
Desde la terminal de Pantitlán, una gran cantidad de pasajeros optó por subirse al transporte alternativo que ha funcionado un año y tres meses que estuvo cerrado el tramo.
“Voy hasta Chapultepec y sería bajar… creo que activaron sólo hasta Isabel la Católica, luego tomar un RTP y luego volver a subir al Metro para ir al lugar donde tengo que ir”, comentó Myriam mientras esperaba en la fila para subirse al Metrobús.
Otros, como Arturo, decidieron usar el transporte alterno, “porque es mucho más rápido, el tiempo que se hace de aquí a Balderas es muy rápido y no batallas con toda la gente que está en el Metro, con empujones y son muy bien organizados”.
Mientras que los que optaron por subirse a la Línea 1 del Metro enfrentaron un transbordo complicado que, relataron, les quitó tiempo.
Descender del Metro en la estación Isabel la Católica para luego abordar un RTP para ir a la estación Balderas resulta complicado, por lo que hubo quienes dijeron que preferían caminar ese trayecto.
Rocío, una capitalina que descendió de un RTP en la estación Balderas, contó a EL UNIVERSAL que demoró entre 20 y 25 minutos en el trayecto desde que salió de Isabel la Católica, por lo que para ella hasta convendría más haberse ido a pie.
“Es complicado el transbordo, porque la verdad es un pedacito y tardas más en subir a un RTP, yo creo que es hasta conveniente venir caminando”, dijo.
Para Felipe, la reapertura no fue lo que esperaba, porque “de todos modos tienes que salir y volver a transbordar al RTP, pero, bueno, nos tenemos que adaptar”. Su trayecto desde que salió del Metro Isabel la Católica a Balderas en RTP fue de 20 minutos, lo que le pareció largo.
A las afueras de la estación Isabel la Católica, que únicamente funciona como salida, se aprecian largas filas de usuarios que salen del Metro para tomar uno de los autobuses de RTP que los llevan a la estación Balderas, en la que el trayecto será habitual hasta Observatorio durante los próximos 10 días.
La estación San Lázaro, que conecta con la Línea B —desde donde viajan habitantes del Estado de México— lució con poca gente, por momentos vacía, a diferencia de como estaba antes del cierre por la modernización de la Línea Rosa.
Por la tarde, el secretario de Movilidad, Andrés Lajous, señaló que hubo una disminución en el uso de autobuses de red de RTP, y en la línea 2 del Metrobús.
En tanto, en conferencia de prensa, el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres, dijo que está en pláticas con la empresa china CRRC, encargada de la obra de modernización, para que haya “mejores ritmos” en la entrega del segundo tramo de la modernización de la línea, que va de Balderas a Observatorio.
“Más o menos en unos 10 días se cierra el siguiente tramo, de Balderas a Observatorio”, adelantó.