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No obstante que sólo durará en el cargo tres meses, la delegada en funciones de presidenta de Morena en la Ciudad de México, Flor Ivonne Morales Miranda, reconoció que “son muchos pendientes” los que debe resolver, aunque destacó que continuará la línea trazada desde las pasadas campañas: “No robar, no mentir y no traicionar”.
En conferencia, luego de rendir protesta en el cargo, la también diputada federal con licencia confirmó que Morena tendrá sedes delegacionales, las cuales afirma que venían operando desde hace tiempo, por lo que descarta la versión de que comprarán inmuebles.
“Son muchos los retos, sobre todo establecer el padrón de militantes, así como mantener la responsabilidad de ser un partido que siente las bases de los gobiernos futuros, desde abajo, desde los pueblos y los barrios, desde las colonias, desde las organizaciones capitalinas y desde los ciudadanos”, dijo en su discurso.
Sin embargo, al ser cuestionada por EL UNIVERSAL en entrevista posterior, sobre si mantendrá los grupos y las prácticas que eran comunes en el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Morales dejó en claro: “En Morena Ciudad de México no habrá caudillismo ni tribus, sino causas ciudadanas y sociales”, sostuvo quien estará en ese cargo hasta el próximo 20 de noviembre, cuando Morena renovará cuadros en todo el país.
El Comité Ejecutivo Estatal que la acompañará lo conforman Alan Aizpuru, secretario general; Federico Rosas, presidente del Consejo Estatal; Héctor Cruz, secretario de Finanzas; Paula Villanueva, secretaria de Jóvenes; Carlos Reza, secretario de Productividad y Trabajo; Felisa Sánchez, secretaria de Asuntos Indígenas y Campesinos, y Jesús Rodríguez, en Formación Política.
Con este equipo, Morales confía que resolverá los pendientes del partido en la capital, pues los anteriores líderes ahora ocupan espacios en el Congreso, los gobiernos y en la administración pública.
