El consumo de alcohol en jóvenes y adultos mayores, y un aumento alarmante de codependencia a los videojuegos, teléfono celular y a la televisión durante la pandemia de Covid-19 preocupan al Instituto para la Atención y Prevención de las Adicciones (IAPA) de la Ciudad de México, afirmó su titular, José Antonio Alcocer.
En entrevista con EL UNIVERSAL, también informó que el instituto realiza una campaña de prevención del consumo de drogas en escuelas públicas en las 16 alcaldías.
“Así como nadie quiere tener Covid, como nadie quiere ser hipertenso, diabético, nadie quiere tener la enfermedad de las adicciones. Es una enfermedad que no sólo afecta a las personas que los consumen, afecta a los seres más queridos, afecta a su trabajo y la gente quiere salir y no puede”, remarcó.
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Alcocer explicó que el IAPA realizó una encuesta en la que participaron 922 personas de más de 16 años. Arrojó que de marzo a septiembre de 2020, en la primera etapa de confinamiento, el consumo del alcohol se incrementó 36.2% en términos generales, donde 40.1% fueron hombres quienes aseguraron que elevaron su forma de beber y 31.7% mujeres.
En el segundo periodo de la pandemia, de noviembre de 2020 hacia 2021 —que fue el más agresivo por el número de muertes—, disminuyó el consumo de alcohol, ya que sólo 35.3% de los entrevistados manifestó haber aumentado su consumo, 38.6% hombres y 31.9% mujeres. Sin embargo, “en cuanto a generaciones, las personas mayores de 55 años y los jóvenes menores de 19 años consumieron más”, precisó el funcionario.
Explicó que el joven, derivado del encierro, no pudo hacer deporte, ver a sus compañeros de la escuela, lo que ocasionó un estado de depresión. En los adultos mayores, “los hijos no podían ir a ver a los abuelitos, se aislaron, y se deprimen. En esas dos poblaciones fueron en las que vimos más incremento”.
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Alcocer destacó que el consumo indiscriminado de alcohol puede impactar en el estado emocional, la toma de decisiones, y las personas suelen ser más proclives a comportamientos imprudentes, agresividad, caídas, lesiones y violencia.
“Una de las preocupaciones que tenemos es el alto consumo de alcohol que hay en los jóvenes”, enfatizó.
Subrayó que el uso de teléfonos móviles, computadoras y televisores, a raíz del confinamiento, sirvieron como distractores o herramientas de trabajo, pero cuando la falta de uso de estos mecanismos llegan a ocasionar severas crisis de ansiedad, son señales que deben tomarse en cuenta.
Además de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) hace unas semanas incluyó a la adicción a los videojuegos en su lista de trastornos mentales, por lo que dichos comportamientos son de importancia saberlos detectar y atender a tiempo.
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El director del IAPA informó que en la capital del país no se tiene el problema de adicción al fentanilo, un opioide sintético entre 50 y 100 veces más potente que la heroína.
Expuso que los inhalantes son una de las principales drogas de consumo en jóvenes y niños. “En otras partes del país, en el norte, sobre todo, el fentanilo ya comienza a ser un fenómeno de consumo, aquí [en la CDMX] vemos el cristal, los inhalantes, que son terribles”.
En el último trimestre de 2021 personal del IAPA visitó más de 100 escuelas de primaria y secundaria para emprender una campaña informativa sobre el daño que ocasiona el consumo de drogas. Estima que este año puedan acudir a entre 300 y 500 planteles en las 16 alcaldías.