Vecinos de tres distintas colonias de Miguel Hidalgo y el alcalde de la demarcación, Mauricio Tabe, denunciaron que desde hace un mes, cuando Gas Bienestar tomó como depósito de tanques viejos a la exrefinería 18 de Marzo, comenzó un intenso olor a gas en la zona, por lo que temen que pudiera ocurrir un accidente de grandes proporciones.
Vecinos, principalmente, de las colonias Huichapan, Ignacio Manuel Altamirano y San Diego Ocoyoacac, en las alcaldías Miguel Hidalgo y Azcapotzalco, alertaron de un olor penetrante a gas desde hace varios días, y aunque no identificaban de dónde provenía, detectaron que su origen es del predio de la exrefinería de Pemex.
EL UNIVERSAL buscó la posición de Pemex sobre esta denuncia; sin embargo, al cierre de esta edición no se obtuvo una respuesta.
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En la esquina de Lago Gascasónica y Lago Saima, en la colonia Ignacio Manuel Altamiramo, los habitantes están alarmados, pues temen un accidente de grandes proporciones, como una explosión e incluso una intoxicación masiva.
Los vecinos refirieron que el olor es todos los días y comienza alrededor de las 20:00 horas, cuando los trabajadores realizan las labores para desechar los cilindros inservibles.
Y denunciaron que no existe comunicación con alguna autoridad federal para garantizar el manejo adecuado de ese material y, por el contrario, han enfrentado la cerrazón de los funcionarios, que no les informan cómo operan para evitar alguna posible catástrofe.
Incluso, revelaron que colocan toallas en puertas y ventanas, para evitar que el olor ingrese a sus hogares, pero aun así ya han presentado consecuencias por esta situación, como sangrado en la nariz, dolor de cabeza y constante mareo.
Por su parte, el alcalde de Miguel Hidalgo expuso que ya habló con el director General de esa compañía, Gustavo Álvarez Velázquez, quien le garantizó que “no hay peligro alguno”, además de comprometerse a que hablaría con los vecinos para explicarles la situación, “pero hasta el momento nada ha hecho”, dijo.
Lamentó estar atado de manos, “pues esas instalaciones son del gobierno federal”, que no escucha la demanda vecinal.
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Agregó que ya habló con el secretario de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, quien se comprometió a que daría solución a la molestia, “pero todo sigue igual y el peligro sigue latente, no sólo por el olor, sino por algo más grande que pudiera ocurrir y, lo peor, de grandes proporciones”.
Ante este panorama, el alcalde Tabe destacó: “Queremos que ellos asuman la responsabilidad y establezcan el periodo de retiro de esos tanques de inmediato, que fijen fecha. Porque si bien aseguran que no hay riesgo, existe molestia de olor y aumenta el peligro de que otras fugas no sean percibidas”.
Aclaró que la demarcación Miguel Hidalgo “no es tiradero de tanques del ‘malestar’ —como llama irónicamente a Gas Bienestar—. Trajeron esa compañía y nos trajeron el ‘malestar’. No somos tiradero o centros de desechos, exigimos que sean retirados. Colaboramos y apoyamos la labor de Gas Natural, pero si genera molestia a los vecinos, mejor que se vaya”, enfatizó.
Reveló que en ningún momento el gobierno federal, Pemex o el propio Gas Bienestar le informaron que los terrenos de la exrefinería serían utilizados como basurero de tanques viejos.
“Lo peor de todo esto es que no hay fecha. Dijeron que esta semana y nada. Hablé con el secretario de Gobierno y reconoce del riesgo, ahora hay que esperar que haga algo. Lamentablemente no puedo intervenir, porque no tengo autoridad en un predio de Pemex”, concluyó Tabe.
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