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“En 20 minutos perdimos todo”, dijo la señora María Alejandra, vecina de Iztapalapa afectada por las inundaciones de las lluvias del 15 de septiembre. Sacaba los muebles mojados de su casa, echados a perder, pues el agua los cubrió hasta la mitad.
Su familia trabajaba en secar y retirar el lodo de las paredes y piso. Colchones, camas y aparatos eléctricos eran levantados por un tractocamión de la alcaldía.
“En cosa de 20 minutos se nos fue todo, no nos dio tiempo de poner compuertas, se nos vino el agua encima. Se mojó la cocina, baño, comedor, sala, recámaras completas. Entró como un metro 50 [de agua]”, contó la señora.
La noche del 15 de septiembre, a unas horas de celebrar el Grito, la lluvia golpeó a la Ciudad de México, e Iztapalapa fue la alcaldía más perjudicada.
En un recorrido realizado por EL UNIVERSAL, los vecinos comentaron que las aguas negras salían hasta de las coladeras y letrinas, y no les dio tiempo de mover sus muebles.
En las colonias como Desarrollo Urbano Quetzalcóatl, 10 de Mayo, las familias vieron cómo perdían su patrimonio “como cada año”, aseguran, y todo lo atribuyen al mal drenaje.
La alcaldía ayer seguía con la limpieza e iniciaría el censo de afectados y una sanitización para evitar contagios de Covid-19.
