Otumba, Méx.-Cincuenta asnos que se encuentran en “ Burrolandia ”, el único santuario de burros que existe en América Latina , están en riesgo de morir porque a los encargados del lugar se les acaba el alimento y han tenido que racionarlo debido a que no tienen recursos suficientes.
Por la pandemia generada por el Covid-19 disminuyó el número de visitantes, que es la única fuente de ingresos que tienen para su mantenimiento, lo que ha complicado la operación del sitio.
Hasta hace algunos días les daban al día 10 pacas de avena y alfalfa a los borricos y actualmente se redujo a cinco pacas, lo que pone en riesgo la salud de los animales.
“Lo que teníamos para poder alimentar a los burros se está acabando, ahora hemos ido haciendo más pequeñas las raciones ya que se pretende no dejarlos de alimentar, es poco lo que se les da y no es suficiente, ya cinco pacas, es nada”, dijo Ana Alfaro, una de las cuidadoras de los animales.
“Burrolandia”, ubicado en la calle La Estación, en el centro de Otumba, fue creado en el 2006 por Germán Flores Souza, quien invirtió su patrimonio y el de su familia para tratar de preservar a ese especie en la región nor oriente del Valle de México.
Cuando abrió el santuario había dos burros y con el paso de los años ha aumentado el número. El 90% de los jumentos han sido rescatados de otros lugares y el restante 10% nació en las instalaciones.
En “Burrolandia” hay actualmente 33 hembras y 17 machos que sufren por la falta de alimento desde hace algunos días.
En redes sociales solicitaron ayuda urgente para que la gente pueda aportar recursos o donar comida y medicina para los pollinos que están bajo su resguardo en el santuario que no recibe respaldo financiero oficial.
Por la crisis sanitaria los administradores de “Burrolandia” suspendieron el programa de rescate de los animales de carga que están en peligro de extinción.
“Filemón es el ultimo burrito que rescatamos, de hecho tiene poquito que llegó a Burrolandia y llegó con un desgaste muy pronunciado en su dentadura, ya que era utilizado como un instrumento de trabajo para cargas muy pesadas, se le fue desgastando severamente su dentadura que lo hizo bajar de peso además de una lesión en su cuello”, contó Ana Alfaro.
Hay peticiones de otras entidades para trasladar a algunos burros al inmueble de Otumba pero por la contingencia sanitaria no es posible por el momento, además de que no tendrían alimentos para otros animales por la falta de liquidez financiera que enfrentan.
Los interesados en visitar “Burrolandia” deben hacer una reservación vía telefónica al número 5549267362 y su estancia se reduce a una hora por las medidas sanitarias que implementaron las autoridades para evitar contagios de coronavirus.