Chalco, Méx.— La inundación no le iba a impedir a Óscar Martínez trabajar.
El 2 de agosto, cuando se registró la tormenta que inundó varias comunidades de Chalco, vio que el nivel del agua empezó a subir en su vivienda, ubicada en la calle Tlaxcaltecas, en la colonia Culturas de México; presuroso, sacó la vagoneta de la ruta 36 que estaba en su patio, la llevó hasta la gasolinería del centro y ahí la dejó, pero ya no pudo regresar.
Como su inmueble se encuentra en la zona cero, era imposible entrar con su vehículo y durmió en él durante más de un mes en la estación de gasolina donde la dejaba estacionada. En la casa donde vive con su familia, el líquido rebasó el metro y medio de altura.
Óscar ya volvió a casa con su vagoneta de la ruta 36 que ofrece el servicio de Chalco al paradero del Metro La Paz, de la Línea A, a su casa, para ayudarle a su esposa a sacar el agua que aún permanece en su propiedad.
No dejó de trabajar porque sabía que faltaría el dinero para remediar los estragos que les causó el temporal.