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Luego de que el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) y el Ejército Mexicano retiraran el puesto de pruebas fisicoquímicas y las plantas potabilizadoras, respectivamente, vecinos de la alcaldía Benito Juárez dijeron tener dudas sobre que el líquido de la llave esté libre de algún contaminante.
“No tengo la certeza, ni nadie, de qué es lo que estaba en el agua, porque jamás nos han querido decir”, dijo Nallely, habitante de la colonia Nochebuena, quien aún compra alrededor de cuatro garrafones al día para bañarse.
Lourdes Calvillo, habitante de la zona, apuntó que la duda de los afectados no ha sido resuelta. “Primero deben decir cuál es el contaminante y luego cómo limpiaron la red y las tuberías”.
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A un mes de los primeros reportes de un intenso olor a combustible en el agua de la alcaldía Benito Juárez, el Sacmex informó que el líquido parece estar en parámetros normales y sin olor tanto en los 13 pozos monitoreados como en los domicilios afectados.
“Que venga a darse una vuelta a las colonias, que escuche a los vecinos de primera mano, no que invente que todos estamos felices y contentos”, dijo a EL UNIVERSAL Alicia Camps, una de las afectadas, quien aseguró que el informe no se sustenta con nada. “No se ha sustentado con nada, con ningún análisis, con ninguna cifra, con ningún parámetro”, refirió.
“No se ha mostrado ningún estudio de laboratorio, han sido negligentes”, dijo Anneliese Pfenich, habitante de la colonia Nápoles.
Para Camps, se trata de un tema electoral, pues aseguró que son rehenes políticos del Gobierno capitalino en este momento. “Somos la piedra en el zapato de Martí Batres, somos un estorbo para ellos y es su obligación como jefe de Gobierno ver por nosotros”, indicó.
En el parque San Lorenzo todavía permanece un puesto de mando para dotar de garrafones a los colonos de la alcaldía Benito Juárez. “Ya casi nadie viene, sólo estamos entregando garrafones de las solicitudes rezagadas y a quienes los pidan”, señaló un trabajador del Gobierno capitalino.