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Naucalpan, Méx.— Aunque el edificio que se ubica en la calle Prolongación Sierra Madre del Norte, en la colonia Alfredo V. Bonfil, presenta daños muy severos en su cimentación, los cuales provocarían que se colapse en cualquier momento, las autoridades locales no planean demolerlo por los riesgos que representa a otras viviendas situadas en la zona.
“No podemos ahorita intervenir, llevar a cabo una demolición controlada, porque es arriesgar al personal, se requiere maquinaria especializada para llevar a cabo eso, no se cuenta, también es un predio particular, sabemos que está en riesgo, ya se notificó al propietario del inmueble de que es un riesgo que está inhabitable y ya se desalojaron a las familias”, aseveró el coordinador municipal de Protección Civil y Bomberos de Naucalpan, Moisés Minquini Matilde.
Se espera que especialistas puedan participar en el tema para ofrecer alternativas de solución, las cuales no pongan en riesgo a las familias que habitan en esa área de Naucalpan.
Minquini Matilde reconoció que el peligro de que el inmueble se desplome es alto y puede suceder en cualquier momento.
“Se siguen presentando daños, ruidos, truenos de deslaves del mismo talud, en cualquier momento puede colapsar”, advirtió el funcionario local.
Las autoridades de los tres niveles de gobierno delimitaron un perímetro de seguridad de 100 metros a la redonda en espera de que el edificio, que era ocupado por cuatro familias, pueda venirse abajo. En los departamentos vivían aproximadamente 50 personas.
Además de esas familias que fueron evacuadas, se hizo lo mismo en tres vecindades aledañas, para que los inquilinos no estén en riesgo, en caso de que colapse la propiedad.
Aún se evalúa si es necesario ampliar el perímetro de protección de las casas contiguas para que no sufran afectaciones en caso de que se colapse el edificio.
En la azotea del inmueble hay dos tanques estacionarios de gas de 500 kilogramos, a los cuales les fueron cerradas las válvulas desde hace varios días para evitar una explosión.
El propietario del inmueble llevó a un perito y también determinó que no tiene reparación por los daños a los cimientos que presenta.
Las autoridades decidieron no dejar pasar a ninguno de los moradores a su departamento para sacar sus pertenencias porque es muy peligroso para ellos. Una de las inquilinas lo hizo para tratar de sacar ropa y documentos, fue detenida por la Policía Municipal, pero fue liberada.
La alcaldesa Angélica Moya Marín ordenó apoyar a las cuatro familias que habitaban en el edificio, quienes rentaban los departamentos, así como a las de tres vecindades aledañas, todas desalojadas para salvaguardar su integridad física.
El gobierno municipal habilitó un albergue para ellos, pero optaron por irse con familiares o amigos. El DIF de Naucalpan entregó paquetes alimentarios, de higiene personal y colchonetas a las familias, además de realizar un censo para determinar qué otro tipo de ayuda requieren y a quiénes se les brindará un apoyo económico para rentar una vivienda.
Cynthia Elizondo Basurto, directora del DIF, explicó que a las familias que radican en las viviendas aledañas sí se les permitió sacar sus pertenencias con apoyo de Protección Civil, pero “evidentemente tendrán que ir a rentar a otra parte o esperar que la situación se estabilice y puedan regresar”.
