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Al grito de “¡queremos a Batres, queremos a Batres!” y “¡hospitales unidos jamás serán vencidos!”, de nueva cuenta trabajadores del sector Salud de la Ciudad de México realizaron bloqueos para exigir mejores condiciones laborales y en rechazo a su incorporación al IMSS-Bienestar.
Fueron ocho bloqueos que paralizaron vialidades como Insurgentes, Miguel Ángel de Quevedo, Nativitas, Ermita Iztapalapa, Congreso de la Unión y Fray Servando, avenida Tláhuac, entre otras, y afectaron el servicio del Metrobús, sobre todo en Insurgentes.
Autoridades aseguraron que se ha dado atención a los diferentes grupos y la mayoría está de acuerdo con el cambio pues han recibido información, pero con los que aún tienen dudas se trabajará.
En punto de las 8:00 horas, doctores, enfermeras y camilleros de hospitales de la Secretaría de Salud comenzaron los bloqueos.
“Exigimos las prestaciones laborales que nos corresponden. Teníamos una mesa de diálogo con el licenciado Montesinos y el doctor Batres, la cual rompieron”, dijo Frida Alvarado, enfermera del hospital pediátrico de Aragón.
Con cartulinas donde se leía: “Exigimos basificación y unificación, mismas condiciones para todo el personal”, los manifestantes realizaron los cierres viales.
En el cruce del Eje 2 Norte, Manuel González e Insurgentes Norte, en Tlatelolco, alrededor de 50 camilleros y enfermeras de varios hospitales se inconformaron.
“Exigimos una basificación y salarios todos parejos, estamos peleando una base Sedesa, una homologación y todas las prestaciones de gobierno”, explicó Carlos.
Cientos de personas no pudieron llegar a tiempo a sus trabajos y tuvieron que caminar varias calles para encontrar un transporte público. “Es un bloqueo injusto, yo sé que hay formas, que vayan allá al Zócalo, aquí nos afectan. Yo vengo caminando desde Forum [Buenavista], vengo mala de mis hernias, me acaban de hacer un ultrasonido y vengo caminando”, señaló la señora María Teresa Salas.
A través de redes sociales, el Metrobús informó que por presencia de manifestantes quedó sin servicio el tramo Indios Verdes-Buenavista, en la Línea 1 y hubo afectaciones en la ruta sur de la Línea 4, y el Servicio Emergente Tláhuac.
Afuera del hospital Enrique Cabrera, en la esquina de Centenario y 5 de Mayo, al menos 10 trabajadores de la salud también se manifestaron. Al exterior de los hospitales Gregorio Salas y Balbuena, otro grupo de médicos y enfermeras cerraron el cruce de Fray Servando Teresa de Mier y Congreso de la Unión.
En los hospitales Pediátrico de Iztapalapa, Hospital Materno Infantil y Materno Pediátrico Xochimilco, ubicado en la esquina de 16 de Septiembre y avenida Tulyehualco, alrededor de 60 personas se manifestaron.
Autoridades capitalinas señalaron que no son necesarios los bloqueos, pues el proceso para su incorporación al IMSS-Bienestar es inevitable. Asimismo, precisaron que la cantidad de inconformes no representa al grueso de trabajadores del sector Salud que están de acuerdo con esta migración.
El jefe de Gobierno, Martí Batres, aseguró que una vez incorporados al IMSS-Bienestar van a mejorar su condiciones de trabajo, hecho que podría ocurrir en septiembre.
“Más allá de la inquietud y exigencias legítimas que puedan tener, es un proceso que se va a dar y que le va a permitir a los trabajadores de la salud de la capital, así como de otras regiones del país, mejorar sus condiciones de trabajo, que es interés del gobierno de la República”, dijo.
El secretario de Gobierno, Ricardo Ruiz, precisó que los bloqueos no representan al grueso de trabajadores que están de acuerdo con el cambio por la información que han recibido en asambleas.