Naucalpan, Méx.— El gobierno local planea autorizar un centro de reciclaje para al menos 20 mil toneladas de cascajo procedentes de la Ciudad de México, que cada semana llegan en camiones que arrojan su carga a barrancas y ejidos de este municipio, tapando árboles y ríos, informó el secretario del Ayuntamiento, Mauricio Aguirre.
La presidenta municipal, Patricia Durán Reveles, afirmó que “necesitamos un sitio para los escombros, residuos de obra que desafortunadamente son los que más se arrojan en tiraderos clandestinos”.
La alcaldesa morenista aseguró que con un relleno de residuos de obra “podemos ordenar todos esos desechos que vienen de la Ciudad de México y que arrojan en tiraderos clandestinos, en nuestras barrancas”.
Tan sólo en materia de cascajo, cada semana llegan a Naucalpan un promedio de mil camiones, cargados cada uno con aproximadamente 20 toneladas de desperdicios de construcción, lo que implica la llegada y descarga de al menos 20 mil toneladas de tierra, tabiques y otros materiales que están tapando tierras ejidales, árboles y ríos, reconoció el secretario de Gobierno.
“Los camiones vienen de zonas como Polanco, en la Ciudad de México, y de lugares de desarrollo del sur de la capital, de forma ilegal, además de que llegó muchísimo material del sismo de 2017”, indicó Mauricio Aguirre.
“Hay un tiradero que tiene una cortina de 30 metros, en la zona colindante del panteón de Los Cipreses, junto al río Las Julianas, que ya quedó bloqueado, es un monumento a la corrupción”, aseveró el funcionario.
En Naucalpan hay un censo de 50 grandes tiraderos de cascajo, 22 de ellos, en estados críticos. El año pasado, once fueron clausurados y al poco tiempo, cinco volvieron a operar. La polución que generan daña la biosfera porque genera una gran cantidad de partículas, afirmó Aguirre Lozano.
Ante este panorama, el gobierno local está considerando, con la inversión privada, “[un centro] como algo positivo, un tiro de reciclaje para cascajo y materiales de construcción.
“Se están ubicando varios espacios, se requieren varias hectáreas para poderlo disponer, una opción es Rincón Verde, otro es Tepatlaxco”, por mencionar algunos sitios, detalló el secretario de Gobierno.
Es un proyecto a seis meses, es una alternativa noble para el medio ambiente, “porque todo lo que llega en cascajo se estaría convirtiendo en material para la repavimentación y bacheo de Naucalpan, será una inversión privada”, agregó el servidor público.
En la última semana de enero, la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México (Propaem) realizó la clausura de siete tiros de cascajo en Tepatlaxco, algunos de ellos ya habían sido clausurados en 2019, pero volvieron a operar, cuando sus administradores rompieron los sellos de inhabilitación, señalaron autoridades.
La llegada de camiones y los trabajos de medición de topógrafos ha generado inquietud entre vecinos de la cuenca de San Mateo, especialmente de Rincón Verde, Aguilillas y Tepatlaxco, quienes protestaron el 31 de enero contra la llegada de desperdicios y la eventual operación de un nuevo tiradero de basura en esta zona.