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emilio.fernandez@eluniversal.com.mx
San Salvador Atenco, Méx.— Por la construcción y operación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAICM) dejarán de llegar a la zona del ex lago de Texcoco cerca de 200 mil aves migratorias, porque se destruye su hábitat y serán ahuyentadas por los aviones, advirtió Patricia Escalante Pliego, investigadora del Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Durante un foro sobre los impactos negativos que traerá consigo el proyecto aeroportuario, realizado en la comunidad de San Cristóbal Nexquipáyac, especialistas de la UNAM expusieron que por las obras que se llevan a cabo, actualmente sólo se está amortiguando 3% del agua, lo que afectará esa zona de recarga de acuíferos del Valle de México.
Los académicos que participaron en el foro El Aeropuerto en Atenco: a 17 años del primer estudio que dijo no, coincidieron en que el proyecto que impulsa el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto debe cancelarse por los daños que ha provocado a la región, aún sin conocerse el resultado de la consulta que se efectuará esta semana.
Las aves migratorias y nativas, algunas en peligro de extinción, son de las especies más afectadas por la edificación del aeródromo.
“Su intención es desaparecer a las aves definitivamente. El Grupo Aeroportuario dice que se están yendo [las aves] a otros cuerpos de agua, pero la verdad es que están buscando alimento y los otros cuerpos de agua no tienen la misma calidad para ellas”, denunció Patricia Escalante.
La bióloga consideró que no se ha dicho toda la verdad sobre los daños que ha causado el proyecto aeroportuario: “Se perderían las aves, nos engañaron diciendo que el lago Nabor Carrillo no se iba secar y que iban crear otros cuerpos de agua y ahora dicen que sí se tiene que secar y se contradicen”.
