Cansados de ser golpeados, humillados y agredidos cuando salen a las calles a resguardar inmuebles y monumentos, así como la integridad de terceras personas durante las protestas de los llamados anarcos, más de 100 elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) capitalina exigieron que se garantice su trabajo y demandaron la liberación de sus dos compañeros detenidos por supuestamente agredir a la joven Melanie.
Los inconformes se concentraron en la Unidad de la Policía Metropolitana (UPM) y, de manera pacífica, solicitaron dialogar con sus superiores; amagaron incluso con no volver a salir a las calles a vigilar las marchas y protestas, al asegurar que “nadie los apoya”.
Dieron a conocer que están organizando una protesta masiva para el próximo 15 de junio, en la cual pedirán respeto y garantías al ejercicio de la Seguridad Pública.
Durante la protesta de ayer, ni un elemento estuvo presente en los destrozos y desmanes que realizaron los anarcos en el Centro.
Al respecto, la jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum, indicó que la gran mayoría de los elementos han hecho un gran trabajo; sin embargo, indicó que se deben abandonar prácticas del pasado, como la corrupción y el abuso policial.
La mandataria aseguró que tendrán el respaldo de la actual administración para que sea una corporación de ejemplo nacional.
“Nuestro objetivo es formar a la mejor policía que tenga el país, ello tiene que ver con el proceso policial y mejorar su nivel de ingreso. Por eso, a pesar de que estamos en una contingencia sanitaria que se refleja en una contingencia económica, de todas maneras nos estamos comprometiendo a incrementar 9% el salario de forma retroactiva. Es un trabajo para acabar con la corrupción y abusos”, dijo.
El domingo pasado, anunció que en coordinación con la Comisión de Derechos Humanos crearán protocolos de actuación de los elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Lo anterior se debe a que uniformados hicieron uso de la fuerza contra una joven de 16 años, llamada Melanie, quien al recibir diversas patadas tuvo que ser trasladada al hospital este viernes, tras participar en una protesta en las calles de la Ciudad por los asesinatos de Giovanni López, en Jalisco, y George Floyd, en Estados Unidos.
Los policías inconformes pidieron la liberación inmediata de sus dos compañeros detenidos y consignados por dicha agresión.
Intentaron dialogar con los encargados de la Seguridad Pública, a quienes les solicitaron apoyos y mejores condiciones para cuando salen a realizar su trabajo, sobre todo en las marchas, en las que aseguraron que son golpeados, insultados y humillados, sin poder defenderse, pues de lo contrario son detenidos y enviados a prisión.
“Si no quieren que les hagamos nada a los anarquistas, pues que no nos manden y que quemen toda la ciudad. Así no vamos a salir a las calles”, explicó María Esther, una mujer policía.