La división política en la Ciudad que dejaron las elecciones del pasado 6 de junio ha dado pie a una serie de publicaciones en redes sociales, que como menciona la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, sólo alienta la división social y el clasismo, algo con lo que coincide ampliamente el dirigente del PAN en la capital del país, Andrés Atayde. Es momento de contener esta ola y dejar atrás los resultados para trabajar, dicen los dos políticos. Pero también se escuchan voces preguntando que quién fue el que inició la polarización en la CDMX y el país. No vaya usted a pensar que la semilla se sembró desde Palacio Nacional.
Señalan a Mario Delgado por la derrota
Con la nueva realidad política en la capital del país, los morenistas comienzan a preguntarse qué fue lo que pasó, pero sobre todo quién es el responsable de la derrota que sufrieron. Algunos, los más molestos, señalan directamente al dirigente nacional y a la secretaria general del partido, Mario Delgado y Citlalli Hernández, quienes metieron mano a la hora de definir las candidaturas y descuadraron el acuerdo previo que tenían con ratificar a sus amigos en algunas demarcaciones. Nos explican que si don Mario dice que tendrán que hacer una valoración, los inconformes le exigen primero una autocrítica y luego asumir los costos de sus decisiones en la capital del país.
El retortijón de Zambrano
Una situación diametralmente opuesta se vive en la alcaldía Venustiano Carranza, donde las huestes de Julio César Moreno, El Nenuco, se preguntan si al líder nacional del PRD, Jesús Zambrano, le habrá dado un fuerte retortijón de estómago al ver que don Julio se llevó de calle las elecciones y, con ello, le dio una bofetada con guante blanco a don Jesús, quien previo a las campañas aseguró que “el perredismo iba más allá de un personaje”. No hay que olvidar que el presidente del partido literalmente echó a la calle a El Nenuco, quien fue bien cobijado por Morena. Afortunadamente el PRD mantuvo el registro, porque de lo contrario hasta ese muerto le hubieran cargado.