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Un bombero murió la tarde del lunes luego de sufrir dos infartos en la cama de un hospital de la delegación Tláhuac, según el reporte oficial del Heroico Cuerpo de Bomberos; el subteniente Santiago Padilla Pérez, con más de 20 años de servicio, acudió a atender una fuga de gas natural en la colonia Agrícola Metropolitana.
El elemento de rescate llegó al lugar a brindar el servicio de emergencia sin el equipo que se requiere para este tipo de trabajos e inhaló una gran cantidad de gas, por lo que al terminar de brindar el servicio se empezó a sentir mal.
En ese momento, dos de sus compañeros con los que llegó al lugar solicitaron una ambulancia y así fue trasladado al hospital más cercano.
Los paramédicos lo reportaron como grave y de inmediato ingresó a terapia intensiva. Aparentemente por su condición física le dieron dos microinfartos y no resistió, por lo que el elemento de los bomberos murió sólo una hora después de inhalar el gas natural.
Según sus compañeros que lo acompañaron a prestar el servicio, Santiago Padilla era el único que no contaba con el Equipo de Respiración Autónoma (ERA), el cual es necesario cuando se realizan este tipo de trabajos o cuando se ingresa a un lugar con mucho humo o material tóxico en el aire.
Una vez que se dio a conocer la noticia, el jefe de Gobierno de la Ciudad, José Ramón Amieva, a través de su cuenta de Twitter envió sus condolencias a los familiares del bombero que murió en el cumplimiento de su deber.
Así también lo hizo Ismael Figueroa, líder del sindicato de bomberos, quien calificó al ahora occiso como un “héroe que cayó en el cumplimiento de su deber”.
La procuraduría capitalina inició una carpeta de investigación para deslindar responsabilidades, pues al momento no queda claro si el bombero incurrió en un error al tratar de reparar la fuga de gas sin el equipo adecuado y sobre todo, esclarecer el por qué no contaba con éste.
