Pablo Ramírez no sólo es el policía capitalino que ganó un reto de lagartijas contra un instructor de un gimnasio durante una manifestación en el Zócalo capitalino, sino que es un deportista de alto rendimiento, pues forma parte de la Selección Mexicana de remo y entrena a sus compañeros de la Subsecretaría de Tránsito de la Secretaría de Seguridad Ciudadana local (SSC) para ponerlos en forma.
“Así como yo tengo buena condición [física], muchos compañeros la tienen, y no sólo eso, la mayoría son profesionistas, son padres, son madres”, expresó el oficial segundo sobre sus compañeros de la corporación.
A casi 24 horas de que obtuvo el triunfo en el reto de flexiones cuyo video se viralizó en las redes sociales, Pablo Ramírez, de 28 años, regresó a vigilar la plancha de la Plaza de la Constitución de la Ciudad para platicar con EL UNIVERSAL.
Con movimientos rápidos de mano, el uniformado recuerda que cuando estaba haciendo las lagartijas se sintió motivado porque sus compañeros lo alentaban.
“Cuando llegué [frente al edificio de Gobierno de la Ciudad de México] mi compañero ya había acabado [quien fue el primero en responder el reto de los instructores de gimnasio], pero en ese momento me gritaron y me dijeron que me estaban retando: ‘¿Quién me está retando o qué? Va, ¿quién es el bueno?’, y en eso sale un vato. Nos quedamos viendo de frente y le dije: ‘¡Vamos a darle!’.
A los 21 años Pablo Ramírez tuvo un accidente durante su servicio que le provocó la amputación de la pierna izquierda. Hoy, con su prótesis, no tiene impedimento alguno para su desarrollo deportivo.
Es un atleta de alto rendimiento en la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) que ha representado al país en el mundo. A la disciplina de remo le ha otorgado medallas de plata y bronce.
Lleva ocho años en la policía capitalina y dijo que la dependencia es su segunda casa ya que ahí conoció a su instructor profesional de remo, quien también es agente.
“Todo empezó por mi entrenador físico de la Selección Mexicana, quien también es policía y por eso fue [que ingresó]. Ahorita me estoy preparando para Tokio 2021, espero clasificar para representar a México”, contó el agente de Tránsito.
Pablo Ramírez dijo que le gustaría entrenar con Paul Villafuerte, quien también perdió una pierna, pero practica deporte y es fundador del gimnasio urbano Las Barras Pradera, en el municipio de Naucalpan, porque comparten el ideal de que el ejercicio fortalece el espíritu de las personas.
“Estoy en el mismo contexto que él, en la misma opinión; el ejercicio es una base fundamental para la salud. Le envío un saludo [a Paul Villafuerte] que tiene los mismos objetivos que yo, poner nuestro granito de arena para cambiar a México. Esperemos algún día poder entrenar juntos. Estamos a la orden”, refirió el uniformado.
Pablo consideró que así como se manifestaron los instructores de gimnasio de forma pacífica, así deberían de desarrollarse todas.