La diputada local de Morena , Guadalupe Chavira de la Rosa, presentará este martes una iniciativa para exhortar a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural , así como al servicio nacional de sanidad, inocuidad y calidad agroalimentaria, tomen acciones inmediatas para evitar la entrada de productos contaminados a la Ciudad de México .
Esto es, aclaró la morenista en su propuesta, porque los alimentos insalubres que contienen bacterias, virus, parásitos o sustancias químicas nocivas causan más de 200 enfermedades, que van desde la diarrea hasta el cáncer, por los que fallecen anualmente 420 mil personas en el mundo y enferman alrededor de 600 millones.
Explicó Chavira de la Rosa en el documento que presentó a la presidenta de la Mesa Directiva, Margarita Saldaña Hernández, que la movilización de productos agropecuarios, “representa un constante riesgo sanitario, debido a que cada entidad tiene distintas características y perspectivas sanitarias”, afirmó.
Además, sostuvo que con la firma de tratados comerciales de México con otros países, ha crecido el riesgo para la introducción de plagas y enfermedades en el territorio nacional.
Ejemplo de ello, dijo, ocurrió el pasado día 4 del presente mes, cuando la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios ( Cofepris ) alertó sobre un brote por Salmonella Enreritidis asociada al consumo de duraznos, por lo que efectuó un operativo de revisión en la Central de Abasto (CEDA).
Ante esta situación, asentó en su iniciativa, “surge la necesidad de habilitar la infraestructura y adoptar estrategias correctivas, que incidan en todas las fases del proceso de producción, para reforzar o mejorar sus sistemas de control de calidad e inocuidad de los alimentos disminuyendo así riesgos en la salud pública”, afirmó.
Detalló que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), uno de cada 10 habitantes en el mundo enferma por ingerir alimentos contaminados , además de que cada año se pierden millones en productividad y gastos médicos a causa de los alimentos insalubres en los países de ingresos bajos y medianos.
Incluso, comentó, “los niños menores de 5 años soportan 40% de la carga atribuible a las enfermedades de transmisión alimentaria, que provocan cada año 125 mil defunciones en este grupo de edad”, además de que las infecciones diarreicas, las más comunes por el consumo de alimentos contaminados, hacen enfermar cada año a unos 550 millones de personas y provocan 230 mil muertes.
Insistió que la inocuidad de los alimentos, la nutrición y la seguridad alimentaria, están inexplicablemente relacionadas, por lo que los alimentos insalubres generan un círculo vicioso de enfermedad y malnutrición, que afecta especialmente a los lactantes, niños pequeños y los ancianos.
Destacó que entre los peligros biológicos de los alimentos, están los organismos microbiológicos, como bacterias, virus, hongos y parásitos, generalmente asociados a los seres humanos y a las materias primas que entran a las fábricas de alimentos, aunque muchos de estos microorganismos están en el ambiente natural donde se cultivan estos productos.
Ante este panorama, la morenista destacó las actividades y funciones propias del Sistema Nacional de Inspección, “porque es importante reforzar este sistema, a fin de disminuir el riesgo de que ingresen enfermedades y plagas animales que provienen de otros países”, dijo.
Añadió que a través de los Puntos de Verificación Interna (PVI), ubicadas en las vías terrestres de comunicación, donde constatan los certificados fitosanitarios expedidos y, en su caso, verifican e inspeccionan los vegetales, productos o subproductos, los insumos, vehículos de transporte, materiales, maquinaria y equipos, por lo que pueden diseminar plagas cuando se movilizan de una zona a otra.
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