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Hacia finales del mes de agosto, las mariposas monarca comienzan el viaje. Desde Estados Unidos y Canadá emprenden el vuelo para llegar, junto con el invierno, hasta los bosques del Estado de México y Michoacán. A estas miles de migrantes las esperan áreas protegidas, después de haber cruzado por tres países, sin fronteras, sin muros que derribar.
Con esta alegoría es como cientos de voluntarios pretenden enviar un mensaje a quienes el próximo sábado 27 de octubre acudan al Gran Desfile de Muertos, que este año se realiza bajo la temática de las migraciones.
“Es una mirada a la frontera sur, es una mirada a la frontera norte y eso lo queremos decir, porque nosotros tenemos migrantes, por nuestro país pasan y están pasando los migrantes; ahorita tenemos un tema muy candente, muy triste por cierto, entonces no podemos cerrar los ojos. Y eso lo envolvemos con las migraciones de las mariposas monarca, que ellas no conocen fronteras ni muros”, afirmó Paola Schlaepfer, productora ejecutiva de Callejón Salao, empresa encargada de diseñar, bajo supervisión de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, el bloque de apertura.
“La muerte es un viaje”, bajo esta temática 700 voluntarios ataviados de catrinas, catrines y otros personajes históricos, harán un paseo desde la primera migración: cuando los aztecas salieron de Aztlán, en búsqueda del águila montada en un nopal devorando una serpiente, señal que indicaría el lugar donde se fundaría La Gran Tenochtitlán.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Schlaepfer explicó que uno de los contingentes recordará la Época Colonial y la llegada de exploradores provenientes de Europa, quienes trajeron consigo a esclavos de raza negra y que se asentaron en Guerrero, Veracruz, Yucatán y Oaxaca.
Habrá también un bloque dedicado a la china poblana. “Viene de de la India nuestra primera china poblana y se fue a radicar a Puebla, era una princesa y sus atuendos causaron fascinación, de ahí se empieza la mezcla y es lo que hoy en día tenemos como la china poblana”, precisó.
Las calaveras también recordarán al general Cárdenas, quien recibió a los exiliados españoles, judíos y libaneses durante la Guerra Civil española, migrantes que hoy forman parte de la población de la capital del país, de la “ciudad Refugio”.
Para Beatriz Steck, productora asociada de Callejón Salao, una de las etapas más bellas del desfile vendrá con las migraciones de animales. Será entonces cuando el cielo de la Ciudad sea invadido por tortugas y ballenas gigantes: “Van a ver unos globos maravillosos pintados por una artista plástica. Son unas ballenas de seis metros de largo para que todos los niños las puedan ver y luego viene la llegada de oriente. La Nao de China y con ellos nos llega también su cultura que absorbemos y se mezcla”.
Además de hacer referencia a la influencia que han dejado las migraciones de Medio Oriente en el país, también se hará un homenaje a los que llegaron y se quedaron, a los mexicanos por adopción: Chavela Vargas, Luis Buñuel, Gabriel García Márquez. “Sin Fronteras. Ese es el mensaje, la gente queriendo pasar, derribando muros”, enfatizó.
Steck señaló que también se hará referencia a las migraciones indígenas, con la participación de un grupo proveniente de Puebla, que escenificará La Danza de Los Tecuanes, donde destacarán las máscaras y coloridos trajes de los viejitos, la presencia del jaguar y el diablo.
Voluntarios. Ambas productoras destacaron que para la realización de este desfile es fundamental la participación de los 700 voluntarios, quienes encarnarán a los distintos personajes, así como a quienes forman parte de la producción y logística.
“Una vez aprobada toda la parte creativa, se empieza con la convocatoria de voluntarios, porque los voluntarios son el corazón de nuestro desfile, sin ellos no tendríamos desfile, sería imposible tener gente profesional y hacer un desfile de esa magnitud (...). Este año rebasamos de manera impresionante el interés, hubo mil 300 personas interesadas en participar, entonces tuvimos que hacer audiciones, sortear un poco, ver cuáles son los que cumplen con el perfil que se requiere para el personaje de los segmentos que estamos presentando, tuvimos que ser un poco más estrictos porque así lo requerían las coreografías, los vestuarios”, indicó Schlaepfer.
Este año, la voluntaria más longeva tiene 97 años e irá a bordo de una trajinera; el más pequeño es un niño de ocho años, quien estará en el contingente del Tata Cárdenas, otro de ellos viene desde el estado de Oaxaca, ninguno es profesional.
Ante los señalamientos que ha habido sobre que el desfile surgió a raíz de la película de James Bond, ambas productoras salen defensa de esta tradición, la cual esperan continúe en los próximos años, pues se trata de un evento que “va más allá de los cambios de gobierno”.