Horas antes de que la procuraduría local intentó detener a Miguel Ángel Vásquez, exsubsecretario de Administración y Capital Humano de la Secretaría de Finanzas de la Ciudad en la gestión de Miguel Ángel Mancera, por presuntos actos de corrupción, en entrevista con EL UNIVERSAL afirmó que está dispuesto a declarar ante las instancias que lo requieran; pero, acotó, que el proceso sea legal y dijo que no pedirá canonjías.
¿Tienes las manos limpias?
—¡Claro! Tan es así (que) no estaríamos metidos en esto —en alusión a la creación de un nuevo partido político en la capital del país.
Así respondió cuando se le preguntó, un día antes de que se le girará una orden de aprehensión y que no se ejecutó porque está amparado, sobre las investigaciones abiertas que tiene la Contraloría capitalina por presuntas anomalías en el manejo de la nómina cuando era funcionario en el gobierno anterior.
En entrevista, realizada el miércoles 11 de diciembre, quien también fue jefe de la oficina de la jefatura de Gobierno, cuando el titular era José Ramón Amieva, consideró que ha habido muchos señalamientos en su contra, pero, reveló, sólo ha habido un citatorio en la Contraloría General: “Ya lo desahogamos y le ganamos el caso a la Contraloría”.
Relató que lo acusaron, que en su calidad de presidente del Consejo de la Caja de Previsión para Trabajadores a la Lista de Raya del Gobierno de la Ciudad, de no haber pagado casi 300 millones de pesos de aportaciones al ISSSTE.
Argumentó que no lo hizo porque hubo una modificación constitucional que ya no obligaba a los trabajadores y por ende al gobierno a pagar, por lo que el dinero no se ejecutó, pero quedó en Finanzas: “Ahora resulta que la pelea es que no le pague al presidente Peña Nieto los impuestos, [es el] mundo al revés”.
El exfuncionario insistió en que siempre ha dicho “aquí estamos” y que incluso le mando un oficio a la Contraloría, por si tenían algo contra él como servidor público. “Si cometes un error, que pareciera un delito, está bien: que te comparezcan, que te citen y que te comprueben que es un delito. No que actúen al revés, eso es lo difícil, que primero matan y luego averiguan”.
¿Es tu caso?
—No, hasta la fecha. Hay muchas cosas que se dicen, yo siempre he esperado abiertamente, nos defenderemos, mi firma ni alcanzaba para mucho. Cuando escucho y veo que era el todopoderoso me pongo a preguntar: ¿Todo eso era yo?
Sobre las acusaciones de mal manejo de la nómina, refirió que se malinterpretan las cosas. “La nómina no la pagó yo ni la hago yo, la hace cada unidad administrativa”, lo cual depende de la Oficialía Mayor.
Sin embargo, quien fue militante del PRD, así como su representante en el Instituto Electoral de la Ciudad de México durante varios años y cercano en sus inicios a René Bejarano, reconoció que esos señalamientos no generaron el mejor clima, en lo personal ni en lo político, para construir el partido SOMOS, Sociedad en Movimiento, que ya cumplió con los requisitos para obtener el registro al realizar 15 de las 11 asambleas requeridas por alcaldía. Tiene 50 mil afiliados, presumió.
Explicó que durante un año estuvo recorriendo la Ciudad, no estaba escondido, por lo que no hay sorpresas o sólo en aquellos que “decían que andábamos huyendo, que habíamos ido a otro país, año y medio nos han traido así”.
Incluso, comentó, cuando pidió espacios públicos para realizar los eventos en las alcaldías no le pusieron obstáculos; por el contrario, hubo algunos que hasta lo recibieron, porque son sus amigos. No quiso revelar sus identidades.
¿El Gobierno sabía de la construcción del partido?
—Mal harían en no saber y no porque se metan (...). No recibí ni vi obstáculo para que se construyera esto. El mensaje de agradecimiento fue al Gobierno capitalino y a las alcaldías. Nos facilitaron los espacios.
Añadió: “Nos conocemos, ya sabemos a qué nos dedicamos cada quien. No debería sorprender”.
Sobre el financiamiento del partido político explicó que fueron aportaciones individuales, él lo hizo con 5 mil pesos. También realizaron rifas y conferencias, que es lo que permite el instituto electoral. Precisó que todo se fiscaliza.
Negó que estén detrás o sean parte de partido Héctor Serrano (exsecretario de Gobierno, actual diputado federal y experredista) ni Miguel Ángel Mancera, de quien dijo que espera nunca perder la confianza.
Tras afirmar que la capacidad y preparación de Claudia Sheinbaum no están en duda, y que se ve que se está dedicando de tiempo completo a gobernar, le envió un mensaje sobre la casi llegada del nuevo partido político: “Este proyecto no viene a entorpecer, a señalar ni a desacreditar nada, al contrario, viene a abonar en lo que se tenga que abonar”.
“En política, los amigos de hoy son los enemigos del mañana; los enemigos de hoy pueden ser tus aliados del mañana”, concluyó.