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Metepec, Méx.—Leslie es la mexicana más joven en ser aceptada por el Ballet Bolshói, su talento nato es tan grande que, con sólo cuatro años de haber estudiado esta disciplina, cautivó el interés de los más altos grados de la academia rusa, a la que sólo un grupo exclusivo de bailarines en el mundo logran ingresar; sin embargo, no podría continuar con sus estudios a nivel profesional si no recibe una beca gubernamental.
Leslie Danai Calderón Duarte tiene 15 años de edad, es una privilegiada, porque el Bolshói, es una de las más antiguas y prestigiosas escuelas de ballet del mundo, se ubica en Moscú y a ella sólo ingresan los bailarines más talentosos del mundo, un reducido grupo al que pertenece esta adolescente mexiquense. “Desde que tengo memoria siempre tuve esas ganas, la pasión por el baile, pero no sabía que era mi vida”, dice.
Su tez morena, sus piernas largas y trazos delgados, además del estilo, atrajeron la atención de las máximas autoridades del Bolshói, a pesar de haber audicionado fuera de tiempo.
Este tipo de baile llegó a la vida de la adolescente por sorpresa, porque en su familia sólo su hermano es músico, pero sus padres no desempeñan actividades relacionadas con el arte, simplemente en ella despertó el interés por el ballet clásico cuando a los 10 años acudió al espectáculo Códices del Pasado, organizado por el Instituto de Artes Escénicas Sokolov.
“Me di cuenta en ese momento de que ese era mi destino, lo que yo debía hacer, entonces mis padres me inscribieron en la academia de Sergei Sokolov, que está en el municipio de Metepec y desde entonces he entregado todo por el baile, incluso me inscribí en la escuela en línea para poder enfocarme sólo en mi instrucción artística”, platica la bailarina.
En 2014, Leslie se inscribió en el instituto en el que su profesor está certificado por el Bolshói, de modo que la instrucción es de alto nivel.
Platica que para ingresar a la academia se inscribió en un curso de verano organizado por Sergei, pues ahí son observadas por integrantes del consejo de la academia rusa, como por ejemplo Viatcheslav Gordeev, director artístico del Teatro Nacional Ruso.
“Apliqué para una beca del gobierno mexiquense, con ese dinero pude viajar a Rusia para audicionar, presentarme ante la compañía, y que me dijeran si cuento con las aptitudes. Fueron tres semanas, del 5 al 23 de agosto del año pasado, fue el mejor momento de mi vida”, cuenta.
Dijo que para pasar este proceso aprendió ruso, perfeccionó el inglés y desde meses antes montó dos piezas: Grand Pas de Quatre y Esmeralda, además se sometió a una dieta estricta que la mantiene en el peso requerido por la academia.
“Contrario a lo que se piensa de Rusia, la bienvenida fue completamente cálida, es una emoción enorme verte junto a grandes estrellas o enormes talentos que también buscan un espacio en la academia más importante del mundo, todo fue muy hermoso, claro que estaba nerviosa, pero iba acompañada por mi abuelita, entonces eso me hizo sentir más segura”, narra la joven.
Leslie recuerda que en 2017 sintió la tranquilidad de que el gobierno mexiquense la había volteado a ver, porque logró acceder a un recurso que le permitió presentarse de forma extraordinaria ante el Bolshói, porque las audiciones formales son en julio, pero haberse presentado frente a Viatcheslav le dio la posibilidad de llegar “a las grandes ligas”.
La preparación. Sergei, el profesor de la joven, platica que gracias a su talento obtuvo una beca que le redujo el gasto de la estancia para su internado en Rusia, pues el costo mensual es de 2 mil 600 euros, pero a ella sólo le costará 2 mil euros mensuales.
Este ruso, casado con una mexicana, y que se dice enamorado de México y de sus talentos, comparte que es director de artes escénicas en el instituto que lleva su nombre, ubicado en el municipio de Metepec desde hace tres décadas, y que preparó de cero y hasta el cuarto grado de especialidad a Leslie.
De su academia emergieron al menos cinco talentos antes que la adolescente; sin embargo, dice que las características que Leslie tiene no son comunes. La academia, dijo, no recibe fácilmente a personas, de miles una es admitida fuera de la temporada de audiciones.
“Ellos tienen mucha visión para su futuro, es muy fácil, la observan los más especializados y deciden si le dan la oportunidad, porque la vieron dos directores de teatro rusos, quienes hablaron con el director de la academia del Bolshói al ver su desempeño en el escenario”, explica.
Es así, como la citaron en Rusia, le pidieron que bailara, pero entonces no hubo una respuesta inmediata. “Dijimos: ‘ya veremos qué pasa’, pero después vino una llamada, luego le pidieron sus papeles, para después decirle que está admitida. Pienso que una estrellita para que brille hay que darle ayuda”, agrega.
Dijo que en su país natal el gobierno arropa a los talentos como esta chica, porque “eventualmente” se convertirán en la cara de la nación, “son un rayo de esperanza para la gente”.
Además, una mujer talentosa como es el caso de Leslie, difícilmente volverá a surgir en pocos años, considera.
“Pienso que quizá el gobierno mexiquense debería abrazar a sus talentos, es importante porque al final son un reflejo del impulso que quiere dar el gobierno a su gente”.