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Para especialistas en materia de seguridad, la administración de Clara Brugada deberá enfrentar delitos que se muestran heterogéneos, ya que unos están a la baja mientras que otros tienen características crecientes; además, deberá continuar con el ataque a delitos de alto impacto como el homicidio, narcomenudeo, extorsión y sexuales.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Mario Pavel Díaz Román, doctor en Ciencias Sociales con especialidad en Sociología e investigador del Colegio de México, refirió que el primer gran acierto para su gobierno deberá ser reconocer que se enfrenta a una ciudad con presencia del crimen organizado.
“El delito de narcomenudeo es ejemplo de presencia del crimen organizado y no se puede negar”, expresó.
Como segundo punto expresó que al contar con un control político por parte de Morena en la Ciudad, Clara Brugada deberá aprovecharlo para tener mayores recursos para su administración y así reforzar estructuras institucionales “que debería redituar en la baja de delitos”.
En materia de extorsión, comentó que este delito es de los más presentes a pesar de su reducción, pues se realiza en diferentes modalidades que cada vez son más notorias, como gota a gota.
Otra área de atención, refirió, es el uso de motocicletas para cometer homicidios dolosos a través de los llamados motosicarios.
“Se ha mostrado que son facilitadores de delitos, en la medida en que es mucho más fácil evadir la respuesta por parte de las autoridades. Sí pensaría que es un tema para atenderse de manera urgente”, indicó.
Para Carolina Jasso, especialista en temas de seguridad y Derechos Humanos, la Ciudad de México sigue enfrentando una situación compleja en materia de seguridad que se manifiesta en el aumento de diferentes tipos de delitos de alto impacto, como extorsión, homicidio y narcomenudeo, pero también otros como la violencia sexual, violación y el robo común.
Explicó que las cifras de los delitos de alto impacto en la capital del país se muestran a la baja, pero en las periferias han aumentado.
“El comportamiento de los delitos tiene tendencias heterogéneas, mientras que unos han ido a la baja otros muestran tendencias crecientes, como la violación o agresiones sexuales a las mujeres”, dijo.
Consideró que uno de los retos para Brugada es “que la estrategia actual de seguridad debe enfocarse en una mejor atención a las víctimas”.
