“E s bonito ver que una nochebuena que siembro y cuido alegra los hogares durante la temporada navideña”, afima Marco Antonio Toledo Zavala, quien desde hace más de 20 años se dedica a la siembra de esta flor en la alcaldía Xochimilco.
Este pequeño productor recibe a EL UNIVERSAL en su invernadero y cuenta que él, junto a su hermano, forman parte de una tercera generación de agricultores, quienes con mucho esmero y cuidado han llevado luz y alegría, a través de las plantas, a miles de hogares.
Precisa que la planeación para la cosecha de la nochebuena les toma prácticamente un año, pues desde finales de diciembre o principios de enero deben hacer el pedido de esqueje a los viveros de Morelos. Cada esqueje tiene un costo promedio de cinco pesos. En su invernadero adquieren casi 30 mil ejemplares. “Nosotros lo pedimos para empezar a sembrar en abril, mayo o junio, dependiendo del tamaño”, relata.
Lee más: Matan a joven embarazada y le extraen al bebé en Veracruz; homicidas le ofrecían ropa regalada para la menor
Marco Antonio recuerda que su padre le enseñó a sembrar la nochebuena, aunque también reciben asesoría de un agrónomo. Sus abuelos, cuenta, plantaban hortalizas y posteriormente sus padres lo cambiaron a plantas de ornato, entre las que se encuentra la nochebuena.
Explica que en abril hay que ir a recoger el esqueje a Morelos y llegando a Xochimilco lo trasplantan a macetas de diferentes tamaños. “De ahí dejas que eche raíz como en un mes, se poda y empieza el desarrollo, hay que estarla fertilizando, fumigando de hongos y bacterias; cuando ya tiene cierta estatura, pues ya está lista para el tapado que empieza en el mes de septiembre”.
El tapado de esta planta, cuando ya está completamente verde, es muy importante para lograr su pigmentación, es decir, que su flor tenga ese color rojo característico, además de que la protege del frío para que no se queme.
Lee más: Fallece el artista Rafael Cauduro
“En el mes de septiembre se empieza con el tapado con plásticos negros para la pigmentación de la flor, son dos meses para este proceso”, precisa. A principios de noviembre la flor ya debe estar lista para la venta. Desde que se siembra hasta su puesta en venta pasan, en promedio, siete meses.
Variedades de tamaños y colores
El agricultor comenta que las nochebuenas más comerciales son del número seis o siete, las cuales sirven para centros de mesa o lugares pequeños. “Entre más grandes, se venden menos, como son más caras, pues no alcanza, entonces las pequeñas son las que se venden más”, dice.
Subraya que, junto a su hermano, producen30 mil plantas al año, las cuales venden en el Palacio de la Flor o algunos de sus clientes acuden directamente a los invernaderos.
Durante la conversación, el agricultor puntualiza que a cada esqueje que ocupa para una planta mediana le invierte en promedio entre 40 o 50 pesos, contando su compra y cuidado, por lo que es buena venta si las comercializa en 140 o 150 pesos.
Marco Antonio Toledo Zavala indica que donde venden el esqueje tienen hasta 30 variedades de colores para la nochebuena, por lo que cada productor compra el de su preferencia; “por ejemplo, la más tradicional es la roja, pero hay amarillas, blancas, salmón, entre otros”, detalla.
Asimismo, destaca que con sus debidos cuidados una planta de nochebuena puede durar toda la temporada y hasta más.
“Hay gente a las que les sigue floreciendo hasta los meses de febrero o marzo. Muchos por no tener lugar, la tiran; otros que tienen jardín las trasplantan y se les va dando y aclimatando, en muchos lugares ya crecen solitas porque ya tienen los nutrientes del suelo, florecen solitas hasta febrero o marzo. Si tienes buena mano se te va a dar”, asegura.
“Las nochebuenas me han dado vestido y comida”
El pequeño productor presume que lo más satisfactorio para él es que de la siembra de plantas ha sacado adelante a su familia, “de aquí les doy vestido, comida, alimento, educación, esa es la mayor de mi satisfacción”. Otra satisfacción es ver vacíos los invernaderos, “cuando la planta se vende prácticamente sola”.
Por ello, invita a todos los capitalinos a ir a los mercados e invernaderos de Xochimilco para comprar las flores de nochebuena. “Hay para todos los bolsillos, desde 20 hasta 300 pesos, dependiendo el tamaño. Un consejo para cuidar las plantas es darles luz y que no les falte su agua, [pero] sin ahogarlas”, señala.
La Secretaría del Medio Ambiente (Sedema), a través de la Dirección General de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural, estima que los productores del suelo de conservación cultivaron un millón 667 mil flores que se van a ofertar esta temporada a los capitalinos. De acuerdo con la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco), la Ciudad de México espera una derrama económica de 500 millones de pesos.
Suscríbete aquí para recibir directo en tu correo nuestras newsletters sobre noticias del día, opinión, Qatar 2022 y muchas opciones más.