Si el alcalde en Venustiano Carranza, el perredista Julio César Moreno, apostaba al olvido con el tema del reordenamiento de los comerciantes afectados por el incendio en el mercado de La Merced es muy seguro que pierda. Nos dicen que hay un grupo de comerciantes que está preparando una manifestación, porque el edil no les da una respuesta y muchos no tienen dónde vender sus mercancías. Hay que recordar que don Julio César se comprometió con la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, a atender el problema y todo parece indicar que simplemente lo está administrando, pero con el riesgo de que se le salga de las manos, nos alertan.
Independientemente de las diferencias que existen en la bancada de Morena, nos platican que para el próximo periodo ordinario de sesiones lo que le interesa sacar al Gobierno central es la Ley Anticorrupción, que les tumbó la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y la ley de desarrollo de planeación. Llama la atención que no les interese la norma que regulará el trabajo no asalariado, que impulsó Diana Sánchez Barrios como propuesta ciudadana y que de acuerdo a la Constitución capitalina es prioritaria, además de que se tuvo un primer acuerdo con los legisladores de sacarla adelante. Los comerciantes no están del todo contentos con el retiro de las calles del primer cuadro y si a ello le suman que su propuesta no es de interés, las cosas podrían complicarse.
El anuncio de los morenistas en el Congreso de la Ciudad de México, de realizar ajustes al presupuesto para entregar 400 millones de pesos a la Universidad de la Salud generó una crisis entre los trabajadores del Poder Legislativo de la Ciudad. Fue tal que el propio diputado morenista José Luis Rodríguez tuvo que salir a pedirles calma y comprometerse a que no habrá despidos de los trabajadores de bases, honorarios o eventuales, sino ajustes a algunas partidas que nada tienen que ver con el salario de los empleados. Lo cierto, nos comentan, es que los trabajadores están muy inquietos con este tipo de anuncios, que ponen en riesgo su estabilidad laboral.
Al secretario del ayuntamiento de Toluca, Francisco Vázquez (Morena), le dejaron la encomienda más difícil, la de contener el comercio ambulante y lograr acuerdos con los líderes de las organizaciones para evitar que se instalen en la zona de la Terminal de Autobuses de Toluca, de hospitales y en el Centro. Erradicar a los informarles fue uno de los compromisos más importantes del alcalde morenista Juan Rodolfo Sánchez Gómez , pero ha fracasado, porque las organizaciones regresan y no sólo se instalan, sino que cada vez ocupan más espacios, así que el encargo al secretario del ayuntamiento es algo así como haberse sacado la rifa del tigre, nada más que los comerciantes son más feroces que los propios felinos.