Abogados del caso Narvarte, en el que fueron asesinadas cinco personas, entre ellas el fotoperiodista Rubén Espinosa y la activista Nadia Vera, confirmaron la oficialización y apertura de la carpeta de investigación por el delito de trata de personas, en el que estarían involucrados grupos delictivos que presuntamente explotaban a dos de las víctimas.

Fuentes cercanas a la investigación refirieron que dos de las cuatro mujeres asesinadas eran explotadas de manera sexual, y que tenían que realizar operaciones con recursos económicos altos, los cuales eran depositados a sus tratantes.

Además, existe la participación de una empresa fantasma, que fue la que presuntamente regularizó el ingreso de una de las víctimas al país.

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Los datos de prueba que se encuentran en la carpeta de investigación señalan toda esta dinámica criminal en la que están relacionados grupos delictivos, ya sea del crimen organizado o de trata de personas.

La mañana del lunes, afuera de la Fiscalía General de Justicia (FGJ), familiares de las víctimas acompañadas de sus abogados, se manifestaron como parte de las acciones realizadas desde el domingo pasado, a siete años de los hechos ocurridos el 31 de julio, pero de 2015.

Ahí, el penalista Héctor Pérez refirió que los datos de prueba para que se abriera dicha nueva investigación, sobre el delito de trata de personas, ya se encontraban en el misma carpeta por la muerte de las cinco personas, pero que habían sido ignorados por la entonces Procuraduría General de Justicia (PGJ).

Refirió que esta línea de investigación se ha explorado desde la recomendación hecha por la Comisión de los Derechos Humanos, y que habría más personas involucradas, no sólo de las tres personas acusadas y en prisión por este caso, dos de ellas ya sentenciadas.

“Esta información ya la tenía la fiscalía y se negaba a investigar”, dijo, y comentó que la apertura de esta nueva investigación es un paso sustancioso por parte de las autoridades.

Otro de los colitigantes en el caso, David Peña, señaló que hay un sujeto, presuntamente el autor intelectual del crimen, así como la participación de un automóvil más.

Esta casa editorial dio a conocer que la fiscalía capitalina tiene en la mira a por lo menos tres personas más, quienes presuntamente participaron en el crimen y no han sido detenidas.

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También que el juicio contra César Omar Martínez Zendejas, tercer detenido por el multihomicidio de la Narvarte, concluyó la semana pasada, por lo que se espera el fallo del tribunal de enjuiciamiento para conocer la pena que deberá pagar.

En la manifestación realizada en la sede de la fiscalía local se pidió la investigación de exfuncionarios de la entonces procuraduría al mando tanto de Rodolfo Ríos Garza como de Edmundo Garrido.

A siete años de estos hechos señalaron que también se han realizado investigaciones por parte de organizaciones en el estado de Veracruz, para conocer el contexto de violencia que se daba hacia la prensa y el modus operandi de las autoridades de aquella administración, encabezada por Javier Duarte.

Comentaron que el próximo 3 de agosto sostendrán una reunión con la fiscal Ernestina Godoy. Pidieron que la institución no deje a un lado la llamada línea Veracruz, por el activismo de Nadia Vera y el trabajo periodístico de Rubén Espinosa.

Acusaron que son pocos resultados en esta administración de la fiscal Ernestina Godoy.

Más tarde, la FGJ dijo que abrió otra línea de investigación además de profundizar la línea ya existente en Veracruz. Pidieron la intervención de peritos de la Guardia Nacional y revisan más de 60 expedientes.

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