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Toluca, Méx.— El problema de la inseguridad en el centro de Toluca persiste, aún siendo de las más vigiladas afirmó Adolfo Ruiz Pérez Méndez, presidente del Patronato Pro Centro Histórico de la capital mexiquense, que agrupa empresarios establecidos en el primer cuadro de la ciudad.
“Está muy patrullada por obvias razones, el primer cuadro tiene a los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, además de la Catedral.
“Incluso siendo de las zonas más seguras de Toluca, hay carteristas y farderos, pero no hemos llegado a índices con violencia como en otras delegaciones del territorio local”, apuntó Pérez Méndez.
Sin embargo, la inseguridad no es el motivo de cierre de diversos establecimientos en esta zona, sino la situación económica, que desde el 2017 no se ha recuperado y que afectó a muchos negocios. Además, durante 2018 el comportamiento del consumidor es “muy prudente”, lo que disminuye las ventas, sumado a la incertidumbre de la elección federal y local.
Incluso, dijo, hay negocios que no tienen la capacidad de inyectarle dinero, provocando el colapso de algunos, casi todos los pequeños establecimientos, como es el caso de restaurantes, uno de los más tradicionales por los años de historia es Las Ramblas, que no pudo sostener la renta del lugar en Los Portales.
Declaró que no es posible señalar el centro como una zona libre de problemas, sino menos incierta que otras latitudes de la capital, en la que registran incidentes delictivos o violentos, según lo que han platicado con otros delegados o representantes vecinales.
“Los robos son ocasionados en algunas ocasiones por los mismos empleados, pero el comerciante ha invertido en cámaras de seguridad, elementos de vigilancia, lo que permite más certeza en el acceso y salida de los usuarios”, expuso.
Añadió que los propietarios de negocios invierten entre 10% a 30% de sus utilidades en sistemas de vigilancia, desde cámaras hasta alarmas, dependiendo del tamaño del establecimiento o el giro, pero “es parte de la inquietud de inseguridad que se vive a nivel nacional”.
El representante agregó que a pesar de las denuncias en redes sociales de comerciantes víctimas de la inseguridad, también buscan nuevas estrategias de protección, además de capacitar a los empleados para que detecten a los farderos que son los más activos en puntos de venta de ropa, electrodomésticos, abarrotes y otros. “Muchas veces ya son conocidos, lo que facilita la disminución de este tipo de atracos de los que no estamos exentos pero que han reducido en mucho, por ejemplo en este trimestre sólo tenemos tres reportes en este sentido”, precisó.