La Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México investiga las agresiones físicas, sexuales y sicológicas realizadas por un sujeto identificado como José Carlo “N” a sus parejas sentimentales.

Aunque el hombre se encuentra en el Reclusorio Oriente, acumula otras indagatorias por violaciones agravadas, por lo que es considerado un serial.

Fuentes allegadas a las investigaciones refirieron que existen más víctimas, por lo que continúan integrando los expedientes.

El sujeto fue detenido el pasado 29 septiembre por la violación de tres víctimas de 18, 19 y 20 años de edad con quien sostuvo relaciones sentimentales en diferentes años.

De manera oficial, la fiscalía no dio a conocer su detención, pero esta fue por cumplimiento de orden de aprehensión por el delito de violación agravada, y fue ubicado en la calle de Nahuatlacas y Huayamilpas en la colonia Ampliación Candelaria, Coyoacán.

La orden de captura en contra del sujeto de apenas 22 años se derivó de la carpeta judicial 010/1882/2021, por la que un juez de Control le giró orden de aprehensión y fue trasladado al Reclusorio Oriente.

De acuerdo con uno de los expedientes, el sujeto agredió a las víctimas de identidad reservada en años distintos, 2017 y 2019, respectivamente.

Todas las víctimas fueron parejas sentimentales del sujeto y de acuerdo con el modus operandi, las obligaba a tener relaciones sin su consentimiento, en ocasiones, las violentaba para cometer el delito. Se logró establecer que el grado de violencia que ejercía provocaba que no denunciaran los hechos.

No sólo eso, las víctimas narraron que tras agredirlas, provocaba lesiones en su cuerpo con objetos punzocortantes, ya sea trozos de vidrio de botellas de cerveza o hasta tachuelas.

El sujeto además realizaba maltrato físico y sicológico al momento de la agresión sexual.

Consta en las indagatorias que las marcas que el agresor llegaba a hacer a sus víctimas era para mostrar que “ya eran de su propiedad”, según las narraciones ante el Ministerio Público.

Detención

Con los datos de prueba, agentes de la Policía de Investigación (PDI) lograron que un juez les otorgara orden de aprehensión y a través del área de inteligencia realizaron labores de campo.

Al realizar vigilancia discreta pie tierra, observaron al agresor y al tenerlo a la vista, se identificaron plenamente como agentes.

Se sabe que existen víctimas que se han manifestado por redes sociales por hechos similares relacionados con el imputado.

El sujeto fue vinculado a proceso y actualmente se encuentra en la prisión; sin embargo, las autoridades capitalinas buscan imputarle más expedientes.

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