La Secretaría de Gobierno de la Ciudad de México precisó que tras el desalojo del bar “El Perro Salado”, en la colonia Tránsito, las autoridades ubicaron a siete menores de edad que no podían salir del establecimiento, entre ellas, una joven de 17 años, quien presentaba indicios de haber ingerido bebidas alcohólicas, por lo que se solicitó el apoyo de una unidad del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) para brindarle atención.
En una tarjeta informativa, la dependencia detalló que luego de hacer una revisión médica a cada una, las menores fueron entregadas a personal del DIF capitalino, que se hizo cargo de acompañarlas a sus domicilios.
La tarde de este viernes se realizó un operativo en dicho bar debido a que se llevaba a cabo un evento con un aforo aproximado de 500 personas, en su mayoría menores de edad, a quienes se les vendían bebidas alcohólicas.
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Tras los hechos, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ) se quedó a cargo del resguardo del establecimiento, mientras se llevan a cabo las indagatorias correspondientes.
Por otro lado, la Secretaría de Gobierno adelantó que se continuará con la implementación de este tipo de operativos en las 16 alcaldías con el objetivo de verificar que los establecimientos cumplan con las medidas de seguridad y protección civil y que cuenten con las autorizaciones correspondientes para su funcionamiento.
El pasado viernes 7 de junio, las autoridades suspendieron actividades en el bar Black en el corredor de Madero, en el Centro Histórico, en donde hubo ocho menores de edad intoxicados con alcohol.