Con el objetivo de intentar desviar las investigaciones y evadir su responsabilidad, feminicidas fingen, luego de asesinar a sus parejas sentimentales, que éstas se suicidaron; con este modus operandi la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ) investiga por lo menos cuatro casos similares que se registraron en diferentes hechos de enero de este año a la fecha, pues los peritajes y los trabajos de los especialistas revelaron que en realidad sufrieron violencia de género.
Aunque de momento dos casos (de años anteriores) ya fueron resueltos y los sospechosos presentados ante un juez, aún quedan otros expedientes por analizar; en dichos casos ni las familias ni los amigos de las víctimas creen la versión de que se suicidaron.
Entre estos casos destaca una joven actriz de teatro, cuyo cadáver fue encontrado suspendido dentro de su departamento; a pesar que en un primer momento los agentes de investigación dijeron que se trataba de un “suicidio”, familiares exigieron que el crimen se investigue bajo los protocolos de feminicidio.
Apenas el martes, la fiscal general Ernestina Godoy informó que obtuvo vinculación a proceso por feminicidio contra dos individuos que, en casos por separado, acabaron con la vida de sus parejas sentimentales, con la apariencia de suicidio, para desviar las investigaciones. Los asesinos fueron identificados como Jesus “N” y Alejandro “N”.
A decir de los expedientes, Jesús “N” refirio a las autoridades de investigación (en 2018) que su pareja se había suicidado con un suéter que los peritos hallaron junto al cuerpo, mientras que Alejandro “N” fingió el suicidio argumentando que la mujer había ingerido alcohol.
En ambos casos, los jueces aplicaron el principio de perspectiva de género, al igual que peritos, detectives y agentes del Ministerio Público, lo que permitió el otorgamiento de órdenes de aprehensión y la vinculación por feminicidio.
“Es fundamental mencionar que, en ambos casos, aplicamos la perspectiva de género. Eso nos implicó darle un alto valor probatorio a lo que acredita el contexto sobre la violencia que ambas vivían en su relación de pareja. En los dos feminicidios revisamos de nuevo los dictámenes, tanto de la necropsia como de las mecánicas de lesiones y de hechos”.
“Tras diversas reuniones con peritos de la propia fiscalía y del Instituto de Ciencias Forenses, y en algunos casos, de otras dependencias, hemos podido y pudimos corroborar que los agentes constrictores, es decir los objetos que usaron para provocarles la muerte, ubicados en el lugar de los hechos, no correspondían con las lesiones que presentaban en sus cuerpos, con lo que se intentó simular el suicidio”, puntualizó la fiscal general en un mensaje a medios.
Con características similares se estima que existen por lo menos 15 casos (desde 2015) que nuevamente, y a pesar que en algunos se dio por “cerrada” la investigación, se pueden volver a abrir y analizar si en realidad las víctimas se suicidaron o fueron asesinadas por sus parejas, quienes, incluso, en algunas ocasiones participaron en búsquedas o colaboraron con las propias autoridades. El objetivo de la fiscalía capitalina es que ni un ataque o agresión hacia las mujeres quede impune.
Por otra parte, Godoy Ramos informó que en el periodo del 2 al 15 de abril, la fiscalía capitalina llevó a proceso a 52 implicados en hechos de violencia contra la mujer. De estos, 23 corresponden a violencia familiar: 15 por abuso sexual; nueve por violación; dos contra la intimidad sexual; dos por feminicidio, y uno por trata de personas.