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A casi un año de su inauguración, el sistema de cobro en la Línea 7 del Metrobús permanece incompleto, pues 14 estaciones no cuentan con máquinas de peaje, lo que ha inconformado a los usuarios.
Las estaciones que no cuentan con este sistema se ubican alternadas a lo largo de la ruta en ambos sentidos, de Indios Verdes a la Fuente de Petróleos. Sin embargo, la ausencia de máquinas se concentra en la zona norte, donde las estaciones Indios Verdes, Hospital Infantil La Villa, De Los Misterios, Delegación GAM y Av. Talismán, carecen de estos aparatos.
Tampoco tienen sistema de cobro Necaxa, Excélsior, Clave, Mercado Beethoven, Glorieta Violeta, Museo de Antropología y Campo Marte.
De estas, destacan las estaciones Delegación GAM y Clave que no cuentan con sistema de cobro en ambas direcciones.
Esta situación ha provocado molestia entre los usuarios, quienes deben caminar hacia la siguiente estación para hacer recargas.
El director del Metrobús, Guillermo Calderón, reconoce la problemática, sin embargo, dice que los usuarios sólo deben caminar menos de medio kilómetro entre cada estación.
“Tenemos 25 estaciones de cada lado, y lo que hicimos es poner [las máquinas] alternadas. Si hay en dirección de Indios Verdes una máquina, en la dirección hacia Periférico no hay porque consideramos que es muy fácil cruzarse la calle a hacer su recarga en la calle adecuada.
“Siempre hay una estación en una distancia no menor de 500 metros en lo que es el corredor. Esa es la distancia máxima para encontrar una máquina de recarga”, declaró.
Al preguntarle si esto no genera inconvenientes a la gente, el director del Metrobús dijo: “Pues a lo mejor, unos pasos más, unos minutos más, pero todos nuestros usuarios vienen de las propias líneas. Al momento no hay ninguna queja formalizada, a lo mejor algún inconveniente de alguna persona, pero no hemos recibido quejas, reclamación o inconveniente”.
Las molestias. “Las máquinas se requieren porque no todos tenemos tarjeta. Yo creo que la gente que utiliza este transporte de manera recurrente pues sí la tiene, pero los que lo ocupamos de vez en cuando, es indispensable que haya máquinas. Tengo el dinero para pagar, pero no hay máquina”, dijo Gilberto Hernández, un usuario.
El hombre pidió apoyo a Alfredo Ponce Reyes, pasajero recurrente del Metrobús, para que le dejara usar su tarjeta a cambio de pagarle seis pesos, que es lo que cuesta el pasaje.
“Quienes no conocen bien, les pasa seguido, entonces tienen que ir a otra estación a recargar y pues se pierde tiempo porque tú tienes el tiempo medido, llegas y que no haya máquinas sí molesta mucho.
“Afecta sobre todo a las personas adultas mayores y he encontrado la situación de señoras con niños”, dijo Alfredo Ponce.