Sin la presencia de la oposición, aunque el PRD se dividió, Morena y sus aliados en el Congreso local aprobaron con 39 votos la Ley de Planeación del Desarrollo de la Ciudad de México; pero dejaron pendiente para el próximo periodo ordinario la ley orgánica en la materia, pues estarán imposibilitados de otorgar los nombramientos.
Luego de cinco horas de ríspida sesión, donde hubo 76 reservas a una ley de 72 artículos, la mayoría provenientes de los legisladores de Morena, el pleno avaló el dictamen de las comisiones unidas de Planeación y Administración Pública local, que establece mecanismos para la planeación de la Ciudad en los próximos 25 años.
Diputados del PAN y PRD auguraron “un caos” en la capital, debido a que, según ellos, “con esta ley la jefatura de Gobierno podrá designar a modo a su planeador carnal y de otros cargos, con lo que podrán hacer y deshacer a su gusto en todos los rubros del supuesto desarrollo de la Ciudad”, dijeron.
Mientras que legisladores de Morena aseveraron que el documento es plural y se incluyeron las voces de todos, las observaciones de los diputados del PAN.
Así, en medio de discusiones, acusaciones y descalificaciones, el pleno del Congreso local la aprobó en lo general a las 14:30 horas, pero para discutir las reservas se prolongó hasta las 17:00 horas. Federico Döring Casar (PAN) y Víctor Hugo Lobo Román (PRD), autores de una de las dos iniciativas, que finalmente fue desecha, reiteraron sus descalificaciones al dictamen que presentó la jefa de Gobierno.
Pese a las diferencias, todos los diputados locales coincidieron con el priista Miguel Ángel Salazar Martínez sobre la importancia y trascendencia de esta ley, “porque es un hito de la ciudad en la que viviremos los próximos 25 años, en su desarrollo en todos los rubros, como urbano, movilidad, inmobiliario, servicios, en fin”, detalló.
Acusó que el dictamen que presentó a Chavira de la Rosa “no respeta la atribución de este Congreso en el nombramiento del director General del Instituto de Planeación y, lo más importante, no considera a los ciudadanos su acompañamiento en la elaboración de la planeación de su futuro, desde su concepción y su derecho”, expuso.
En esto coincidió Döring, quien al percatarse de que todas sus reservas eran rechazadas por la mayoría, los diputados del PRI, PRD y PAN acordaron abandonar el salón de plenos, a excepción de los perredistas Paula Castillo Mendieta y Valentín Maldonado Salgado, quienes fueron con Chavira para abrazarla y delante de ella votaron a favor del dictamen.
Aunque Chavira y demás morenistas acusaron al PAN, PRI y PRD de subir a tribuna, “para engañar a la ciudadanía, como ha sido su costumbre. Ustedes y sus partidos nos tienen en esta posición, una ciudad desordenada en todos los rubros”.
Queja
Antes, la sesión ordinaria de este miércoles comenzó a calentarse con la queja “por violencia parlamentaria de género”, que presentó Chavira contra Döring.
Esto provocó enfrentamientos del PAN y PRD contra Morena, por lo que la presidenta de la Mesa Directiva, Isabela Rosales, calmó los ánimos al invitar a la Junta de Coordinación Política (Jucopo) a crear el comité de ética parlamentaria, que desde hace meses debió iniciar su operatividad, donde sería canalizada esta queja.
Sin embargo, el presidente de la junta, Mauricio Tabe Echartea, respondió que si dicho comité no ha sido creado “no es culpa de la Jucopo, sino que ninguno de los diputados se ha puesto de acuerdo de quién o quiénes lo integrarán. Ustedes digan cuándo y de inmediato procedemos a crearlo”.