Trabajadores del Hospital General de La Villa, de la Secretaría de Salud (Sedesa) de la Ciudad de México, se manifestaron contra una nueva reconversión para sumar más camas para pacientes con Covid-19, ya que presuntamente no tienen las condiciones para atenderlos.
De acuerdo con la dependencia, la unidad mantendrá su carácter híbrida e incrementará en 30 el número de camas con ventilador para atender a pacientes con la enfermedad.
Alrededor de las 11:00 horas de ayer, el personal de salud bloqueó por varias horas el cruce de la calzada de San Juan Aragón y Gaviotas, en la alcaldía Gustavo A. Madero, y con pancartas mostraron su inconformidad por la reconversión total. “No a la conversación, somos urgencias”, “no hay insumos”, fueron algunas de las exigencias.
Médicos y enfermeras dijeron que no cuentan con el equipo necesario para la reconversión, además, varios de sus compañeros, entre ellos especialistas, se han contagiado de Covid-19.
La titular de la Sedesa, Oliva López Arellano, aseguró que el grupo que se manifestó en las inmediaciones del nosocomio está vinculado a intereses sindicales, pero que no hay riesgo para los trabajadores.
“No está en riesgo, esta protesta es de un grupo pequeño de personas que está vinculado a algunos intereses sindicales, pero de todos modos nosotros siempre tenemos un vínculo y un espacio para dialogar con los trabajadores, se hará una mesa de trabajo, vemos sus demandas y damos salida a lo que sea posible de atender”, expuso y reiteró que la Ciudad requiere de la ampliación hospitalaria.
En una tarjeta informativa, la Sedesa aseguró que el hospital cuenta con abasto suficiente de insumos y medicamentos, así como equipos de protección personal que cumplen con los estándares internacionales para atender la pandemia por Covid-19, los cuales son proporcionados al personal sanitario en tiempo y forma.