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El Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro considera urgente resolver la situación en el conjunto Pantitlán, estación que es terminal de en las líneas 1, 5, 9 y A, principalmente en la 9 donde ha habido problemas de cimentación.
“En el caso de la Línea 9, la diferencia de comportamiento entre cimentaciones contiguas produce efectos nocivos a la superestructura de la estación, afectando locales, andenes, entrepisos, escaleras y conexión con las pasarelas”, dice el informe del Plan Maestro del STC Metro.
En un recorrido realizado por EL UNIVERSAL se observa que afuera del Metro, en el Eje 1 Norte, hay un hundimiento de más de 50 centímetros que afecta la parte delantera de los andenes de la estación y, aunque ya se ha realizado trabajos para disminuir este problema, se acelera el hundimiento.
El Plan Maestro indica que las diversas estructuras que constituyen el Conjunto Pantitlán presentan diversos tipos de daños y deformaciones en elementos estructurales y no estructurales, cuyos efectos son de magnitudes variables y, en ciertos casos, los niveles de servicio no son deseables, incluso ponen en riesgo la integridad de los usuarios.
Señala que es necesario realizar los estudios, los proyectos y la obra resultante en cada una de las cuatro líneas que integra el Conjunto Pantitlán, las pasarelas de correspondencia y en especial resolver el intercambio entre ellas, la cual tiene su origen en la solución de cimentación establecida para cada estructura y el fenómeno de hundimiento regional.
“Se podrían corregir las averías en la estructura propiciadas por los asentamientos diferenciales, ofrecer instalaciones seguras para el usuario, la operación y los trabajadores, y se garantizaría instalaciones con una ampliación mínima de 30 años de vida, en condiciones seguras, así como eliminar el riesgo a la integridad física de los usuarios, por la aparición de desniveles en las estructuras coincidentes a las circulaciones”, expone.
Algunos vecinos de la zona y usuarios señalaron que desde hace algunos años se han hecho denuncias sobre estas afectaciones y, aunque han hecho algunas mejorías, la situación sigue empeorando, debido al subsuelo.
“Hace algunos años observamos que el piso de Eje 1 Norte, principalmente abajo de las vías de la Línea 9, comenzó a saltarse, es preocupante, pero no pasó nada con los sismos del año pasado, así que creo que no está mal, pero nuestra queja es que en el interior del Metro escondieron el problema, pusieron laminas para ocultar las estructuras de las escaleras”, dijo Carolina.
Durante el recorrido en esta estación se observó que en la zona afectada hacen paradas vagonetas y camines entre el hundimiento.
