A raíz del destape de Enrique Vargas del Villar como candidato del PAN a la gubernatura del Estado de México, la alianza con el PRI cada vez parece más lejana. Nos cuentan que el blanquiazul, que encabeza Marko Cortés, quiere carro completo y eso no solo contempla a Enrique Vargas como el elegido para competir en la elección en 2023, sino que el PAN también busca definir al candidato para el estado de Coahuila, como quien dice, quieren acaparar el paquete completo, cosa que para el tricolor no parece tan conveniente. Hay otros aspectos a considerar, pues según las encuestas del PRI, en el Edomex sus aspirantes mujeres podrían dar una “gran batalla” en las urnas, particularmente ahora que se ha definido que la abanderada morenista será la maestra Delfina Gómez, así que desde tierras mexiquenses siguen respaldando la idea de que sean las priistas Alejandra del Moral o Ana Lilia Herrera quienes encabecen la alianza.
Va el PVEM solo por el Edomex
Y ya que los ánimos andan muy caldeados en el Estado de México, el Partido Verde Ecologista no quiso quedarse atrás y anunció que el 20 de noviembre tendrá a su candidato rumbo a la gubernatura mexiquense; José Couttolenc, dirigente estatal del partido, dijo que esta decisión se tomará mediante consulta en las delegaciones municipales del PVEM y el Consejo Político Estatal. La noticia causa cierto sospechosismo, pues los verdes en anteriores elecciones han apostado por ir en alianza con Morena, y aunque aplaudieron la designación de Delfina Gómez como coordinadora de los Comités de Defensa de la 4T en el Edomex, tal parece que en esta ocasión apostarán por ir solos en la contienda. ¿Será?
El nuevo dirigente de Morena
Nos cuentan que desde la dirigencia nacional de Morena, que encabeza Mario Delgado, se definirá si será un hombre o una mujer quien presida la dirigencia del partido en la Ciudad de México, y así en las 31 entidades restantes. Esto a pesar de que será el 30 de julio cuando se votará por los 240 congresistas en la Ciudad de México, mismos que serán los encargados de elegir al nuevo dirigente del partido en la capital, quien habrá de tomar las riendas del mismo el 13 de agosto. Mientras eso sucede, ya comienzan a moverse las aguas entre los morenistas, pues si el aval del nuevo dirigente viene desde las oficinas de don Mario, poco habrá que hacer al respecto. La pregunta es: ¿habrá transparencia en la elección y se garantizará la equidad de género? Lo veremos en una semana.