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A la hora de su detención, Eduardo “N”, El Bandido o Dead Pool, uno de los principales operadores de La Unión Tepito encargado del cobro de extorsiones en colonias como Polanco, Condesa y Roma, además de ejecutar los asesinatos encargados por el exlíder David García Ramírez, El Pistache, amenazó de muerte a los elementos policiacos que lo detuvieron.
Les dijo que tenía gente al interior de la corporación policiaca capitalina, así como de la Fiscalía General de la República (FGR), que podían matarlos; sin embargo, al ver la negativa para dejarlo en libertad, ofreció a los efectivos 100 mil pesos, un Camaro LTZ y un Mercedes Benz en el que viajaba en la colonia Escandón, donde fue detenido.
Elementos de la división de inteligencia policial cercaron a Eduardo “N” y a cinco más de sus cómplices, entre ellos dos mujeres, luego de que una víctima denunciara que había sido extorsionada con 5 mil pesos.
Vía C2 y C5, comenzó el monitoreo de los sujetos, quienes viajaban a bordo de los vehículos de lujo.
Agentes encargados del operativo comentaron que ya daban seguimiento a El Bandido, pues una de las características de su célula, así como de los líderes de La Unión Tepito, es el uso de automóviles último modelo.
Los ubicaron cuando viajaban en convoy: “Bajaron con armas largas, pero activamos protocolos para que no hubiera un enfrentamiento”.