“Nico” y “Nicky”, dos máquinas removedoras de barrera que habría adquirido OHL y que no se usaron por casi una década, empezaron a operar para ampliar un carril reversible a la carretera Nicolás Romero-Atizapán y dar fluidez a la salida y retorno de 200 mil habitantes que todos los días salen a trabajar rumbo a la Ciudad de México y a otros municipios metropolitanos.
El presidente municipal morenista, Armando Navarrete López , informó que en la primer etapa que empezó a operar este 4 de diciembre, las maquinas removedoras sólo ampliarán un carril reversible por las tardes: 17:00 a 22:00 horas, para facilitar el retorno de habitantes a este municipio.
La segunda etapa del carril reversible podrá extenderse al menos en un kilómetro más, hasta la conexión con la autopista Chamapa-La Venta, una vez que la alcaldesa Ruth Olvera Nieto , gobernadora de este municipio, acceda a participar en este plan para agilizar la circulación en una de las vías más congestionadas del Valle de México.
Incluso las máquinas removedoras del muro de contención central podrían operar a lo largo de ocho kilómetros, pasando por Atizapán de Zaragoza hasta llegar a Tlalnepantla , apuntó el alcalde Armando Navarrete, quien detalló que ésta es la primera ciudad del país en usar dicha tecnología.
En los 4.5 kilómetros en los que empezó a operar el removedor de barrera, este 4 de diciembre, los habitantes pasarán de 45 minutos a una hora de trayecto a un tiempo anterior de siete a 14 minutos, de acuerdo a las pruebas que realizaron autoridades de movilidad de Nicolás Romero.
“Nicky” y “Nico” fueron llamadas así en Nicolás Romero y son propiedad del Gobierno del Estado de México , con quien este ayuntamiento firmó un convenio, el cual vence hasta diciembre de 2021, informó Navarrete López.
Estas removedoras de barrera habrían sido adquiridas por la empresa española OHL , durante la construcción del segundo piso del Periférico Norte , llamado Viaducto Elevado Bicentenario, presuntamente para agilizar la circulación en los carriles a nivel de piso durante la construcción de esta autopista de cuota.
Sin embargo, estas herramientas llamadas “ road zipper ”, no se usaron a lo largo de los 22 kilómetros del segundo piso mexiquense, para resolver el caos vial de Periférico Norte en su enlace con la autopista México-Querétaro, y permanecieron sin uso por casi 10 años.
“Estaban resguardadas, sin usar, bajo un puente vial de Ecatepec ”, señalaron autoridades de Movilidad de Nicolás Romero. “Nos tuvimos que ir a capacitar a Dallas Texas, para aprender a usarlas y habilitar su uso aquí", afirmó Navarrete López.
Estas máquinas mueven 5 mil bloques de concreto y plástico en la zona de curvas, que conforman la valla central que divide los cuatro carriles de la carretera Nicolás Romero-Atizapán , para ampliar de dos a tres carriles en horas pico.
cev