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Zinacantepec, Méx.—En el Estado de México, la Secretaría de Salud no tiene dinero para concluir la construcción y poner en operaciones nueve unidades hospitalarias que heredaron de la pasada administración, que en promedio requerirían 120 millones de pesos al año para funcionar, reconoció su titular Gabriel O’Shea Cuevas.
El secretario informó que se trata de hospitales planeados para albergar 18 camas cada uno, ubicados en los municipios de Coacalco, Acolman, Aculco, Zumpango, Zinacantepec, Tepotzotlán, Chicoloapan, Atlacomulco y Cuautitlán Izcalli, que fueron anunciados por el ex gobernador Eruviel Ávila Villegas como parte de la red hospitalaria estatal.
Explicó que cada una de estas estructuras tiene un costo de 200 millones de pesos para su construcción y que se trata de hospitales resolutivos en los municipios, pero “no hay dinero para acabarlos”.
“Los iniciaron y bueno, no tenemos dinero para terminarlos, están detenidos. Ya terminamos el de Lerma”, aseveró.
Sin embargo, dijo que el resto siguen pendientes y ninguno cuenta con los requisitos que exige la federación para aportar presupuesto federal, de modo que, dijo, su tarea será acudir con el siguiente secretario de Salud en el país para retomar lograr acuerdos y concluirlos.
Reconoció que el presidente electo Andrés Manuel López Obrador hace unos días fue claro en su discurso y adelantó que no habrá nuevos hospitales; sin embargo, mencionó que terminaría los que están en construcción, por tanto “quiero pensar en que podrán ser estos nueve, equiparlos y ponerlos en marcha porque el problema no está sólo en acabar la construcción, sino en ponerlos a trabajar”.
El secretario afirmó que dichas unidades hospitalarias son necesarias, pero explicó que se requieren 120 millones de pesos anuales para lograr que funcionen, eso es lo que en promedio cuesta una construcción de 220 millones de pesos, pues debe ser considerado el personal, material y los insumos.
“El año que entra, espero que con el nuevo gobierno tengamos el dinero para terminarlos, para equiparlos y echarlos a andar, porque el gasto de operación hay que pedirlo a la federación”, mencionó.
O’Shea Cuevas precisó que cuando un gobierno estatal propone construir un hospital, primero debe ir con el secretario de Salud nacional, quien hará un análisis y determinará si es necesario para la localidad planteada, de obtener una respuesta positiva, entonces la entidad obtiene una clave que comparó con “el acta de nacimiento”, donde la federación especifica que otorgará el dinero para operarlo cada año y eso es lo que no tienen los nueve pendientes.