rebeca.jimenez@eluniversal.com.mx
Cerca de mil policías estatales, federales y municipales custodiaron la reactivación de obras del Tren Interurbano México-Toluca , en las inmediaciones del kilómetro 31 de la autopista Méxic-La Marquesa, luego de que comuneros y ejidatarios impidieron esta obra argumentando daño ambiental.
Cientos de elementos de fuerzas federales, estatales y municipales resguardaron este punto ubicado frente al ININ (Instituto Nacional de Investigaciones Nuclear) en La Marquesa, para permitir a cuadrillas de trabajadores de las empresas constructoras la continuación de los trabajos.
Eloy Gloria, responsable del tramo uno del Tren Interurbano México-Toluca, informó que en esta zona labora un consorcio de dos empresas, una de ellas La Peninsular, quienes por oposición de comuneros y ejidatarios no podían realizar trabajos en un tramo del kilómetro y medio
“Tuvimos problemas para trabajar en este tramo en tres ocasiones, intentamos ingresar con maquinaria y había dificultades, por la complejidad de los trabajos y por la premura del tiempo es que hoy las obras se reactivan” e ingresaron con apoyo de la fuerza pública, indicó Eloy Gloria.
Sólo pudieron realizar estudios de sondeo para conocer la mecánica de suelos y trabajos de medio ambiente, pero por la oposición de pobladores de Acazulco y Tepexoyuca hace un año se suspendieron los trabajos. Aquí se realizaron convenios indemnizatorios, para adquirir la franja del derecho de vía del tren, “tenemos los documentos que comprueban que pagamos a ejidatarios y comuneros Acazulco y Tepexoyuca, no existe motivo para que impidan las obras”, afirmó el constructor.
Gerardo Ruiz Esparza, secretario de Comunicaciones y Transportes, quien recorrió la obra el 11 de noviembre, aseguró que el Tren Interurbano estará listo en julio de 2018 para realizar pruebas operatorias desde Zinacantepec hasta la CDMX.