Será en los próximos meses cuando incremente la demanda de ayuda alimentaria en el Estado de México , pues con base en las estadísticas al menos 2 millones de personas quedarán desempleadas hacia finales del 2020 y no son certeros los donativos de empresas hacia instancias como el Banco de Alimentos estatal, lamentó el presidente Alberto Canúl Juárez.
Lo grave, agregó, es que los donativos se han reducido - aunque en un bajo porcentaje - y en el caso del Banco de Alimentos estatal están a la expectativa de cómo reaccionarán las empresas en próximos meses para mantener estos apoyos de despensa.
Informó que entre marzo y agosto, cuando se agudizó la pandemia por Covid-19, atendieron a 15 mil 800 familias con 27 mil 853 despensas.
Mientras que en marzo, abrieron una bodega de acopio y distribución en el municipio de Chalco, donde a la fecha atienden a un promedio de 8 mil personas.
Entre los beneficiarios se encuentran comerciantes de Chalma, que suspendieron sus actividades por tres meses, los lancheros y locatarios de la zona de embarcaderos de Valle de Bravo, artesanos de Teotihuacán, floricultores de la región de Villa Guerrero, sacerdotes de la Arquidiócesis de Toluca, artesanos de Temoaya, entre otros.
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Explicó que muchos de los beneficiarios fueron canalizados por los clubes rotarios, asociaciones civiles y áreas gubernamentales, algunos de ellos recibieron la ayuda dos o más ocasiones, como es el caso de los meseros independientes, quienes tienen una condición financiera muy grave.
“Tenemos un listado todavía, no pude decir si por fortuna ha reducido la cifra de solicitudes pero seguimos entregando cada 15 días ayuda para 2 mil familias aproximadamente”, afirmó.
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