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Ecatepec, Méx.— Desde hace más de tres semanas Cristian Reyenel duerme en una colchoneta porque las camas que tenía en su casa, en la colonia Tierra Blanca, quedaron bajo el agua y el lodo que arrastró la corriente de la parte alta en la Sierra de Guadalupe el 6 de septiembre pasado.
Su esposa y su hija pequeña, por el contrario, duermen en una cama que les regalaron hace días, pues aún no recuperan todas las pertenencias que perdieron. Enseres electrodomésticos, sala, comedor, pantallas y ropa se fueron a la basura horas después de que la tromba pasó y les permitió limpiar y sacar todo lo que quedó inservible de su casa, ubicada a un costado de la barranca Las Venitas.
Los servidores ya pasaron a hacer el censo de damnificados a su predio, donde viven tres familias, pero aún no saben cuándo y cuánto les darán las autoridades para reponer parte de lo que perdieron, prácticamente en un abrir y cerrar de ojos. Fue el 13 de septiembre cuando la Secretaría del Bienestar levantó el censo; hasta la fecha ninguna familia ha recibido apoyo.
